La compañía alemana de equipamiento deportivo, ha anunciado que cierra su única fábrica en propiedad en el país asiático. Sin embargo, China continuará siendo el principal país productor de artículos Adidas gracias a los acuerdos que la compañía tiene con 300 empresas subcontratadas.
De acuerdo con The Wall Street Journal, el establecimiento que Adidas cerrará a finales de octubre -que emplean a 160 trabajadores- está ubicado en la ciudad costera de Suzhou.
Este cierre se enmarca dentro de la estrategia de la empresa de reestructurar su negocio tanto en China como a nivel global y de garantizar la eficiencia y la escala de influencia de la compañía.
Adidas, que cerró el ejercicio 2011 con una facturación de 13.344 millones de euros y cuenta actualmente con 2.401 puntos de venta en todo el mundo, ha experimentado en los últimos años un notable crecimiento. Esta situación se debe, en gran parte, al buen comportamiento de los mercados asiáticos y al potente desarrollo del running y el fitness en Europa y Estados Unidos.