China gravaría a más artículos de lujo, ampliando un piloto de impuesto a la propiedad más allá de sus pruebas en Shanghái y Chongqing, en tanto impulsa sus planes para reformar la segunda economía más grande a nivel mundial.
De acuerdo con la agencia oficial Xinhua, el ministro de Finanzas Lou Jiwei, menciona que China gravaría el consumo de productos que causan contaminación ambiental severa y sobreexplotación de recursos.
Además, los líderes del país asiático han impulsado una fuerte línea de reforma como esencia de su política económica, con la meta de reestructurar la economía y enfocarla más en los consumidores que en las exportaciones, grandes industrias y el crédito.
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