A principios de marzo, el estudio de RSR Research indicaba que para el 50% de los retailers, el móvil está implicado en el proceso de compra más de la mitad del tiempo y el 44% de ellos estima que en 2017 estos dispositivos inteligentes estarán presentes durante el 75% del tiempo.
Por otra parte, el estudio publicado en marzo por Ebates mostraba cómo un 55% de los consumidores consideraba que comprar con su móvil les ayuda a ahorrar, dado que les permite comparar precios y productos al instante.
Otras ventajas del comercio móvil es que pueden canjear cupones online (38%), reciben notificaciones sobre ofertas (39%) y descuentos (23%).
Este nuevo comportamiento por parte de los consumidores les lleva a demandar una experiencia integrada de todos los canales que les permita acceder a un producto y su información a través de cualquier medio o dispositivo. Asimismo, los retailers tienen la posibilidad de utilizar el medio online para atraer a sus clientes a la tienda y favorecer la conversión offline.
Gracias a los cupones y promociones pueden captar a sus clientes y proporcionar una experiencia completa, independientemente del canal que elijan para materializar sus compras.
La premisa básica que destacan estos consumidores es que la app les resulte útil al contar con soluciones a necesidades básicas, como ayudarles a encontrar el establecimiento, acceso al servicio de atención al cliente y claro, poder comprar online.
El otro lado de la moneda
Sin embargo, según Tradedoubler (especialista en moda y tendencias en las compras online) que realizó un estudio donde participaron 9 países europeos, se pudo destacar que las tiendas son afectadas directamente, cuando a un 32% de sus compradores les surge la duda sobre la compra de un producto a partir de la información encontrada en internet, gracias a su móvil, mientras que un 20% decidió en comprar algo más, y otro 22% optó por adquirir el producto online, lo que representa un 54% en contra.
Las conclusiones de Tradedoubler son asimismo aplicables a las reflejadas en el estudio de Apigee, donde se indicaba que en Estados Unidos el 81% de los usuarios de smartphone reconoce que este dispositivo ha influido en su forma de comprar. Nada menos que el 66% se mostró más dispuesto a comprar en aquellas tiendas físicas que contaran con una aplicación móvil.