Como un nuevo paso en la ejecución de su plan estratégico, la textilera Fabricato anunció el cierre de diversas filiales que no eran productivas para la compañía en países como Venezuela (Fabricato Textiles, Fabritexca), México (Fabrimexico), Perú (Fabricato del Perú) y Ecuador (Fabridor), para centrarse en aquellas que realmente aportan al negocio.
El presidente de Fabricato, el brasileño Carlos Alberto de Jesús, anunció durante la asamblea de accionistas que llevaría a cabo esa reestructuración para salir de negocios menos rentables como las líneas de hogar, lanas o teñidos para reforzar su operación local y de exportaciones.
La compañía sostuvo que ya inició todos los trámites legales para liquidar formalmente esas empresas y “concentrar sus esfuerzos de venta en la sociedad Matriz Fabricato”.
Esta decisión no parece sorpresiva luego de que se conocieran los resultados de la Superintendencia de Sociedades sobre el ejercicio del año pasado.
Fabricato reportó sus ingresos operacionales en USD$ 226 millones, fue menor en 20,04% al año 2012. Asimismo, la compañía presentó unos activos valorados $969.673 millones, aunque cayeron en 12,38 por ciento.
Por otra parte, el Ebit, aunque tuvo un crecimiento de 51,33%, no le alcanzó a Fabricato para lograr resultados en terreno positivo, fue negativo en USD$ 40.500. Consecuente con las cifras anteriores la utilidad neta representó pérdidas de US$ 63mil.