De acuerdo con el jefe de Análisis Macroeconómico de Apoyo Consultoría, José Carlos Saavedra, si bien en octubre este índice se ubicó en 50 puntos por tercer mes consecutivo, es considerado un nivel bajo no visto desde el 2010.
“Esto significa que el número de familias que percibe mejoras en las condiciones para consumir es igual al número de familias que percibe deterioros”, explicó.
En ese sentido, señaló que con el resultado de octubre se confirma que un importante porcentaje de consumidores en la capital está percibiendo un deterioro en los diferentes ámbitos que afectan sus decisiones de consumo.
En este contexto, el analista detalló que de los cinco ámbitos incluidos en la muestra para medir el índice de confianza, la caída se produjo en cuatro.
Indicó que solo el componente de precios fue el único que aumentó al pasar de 46 a 50 puntos, lo que se explica por la disminución en la tasa de inflación anual observada desde setiembre. Así, sin este efecto, el índice habría caído en octubre.
Los ámbitos sobre los cuales una mayor cantidad de consumidores percibe deterioros son la situación económica del país y las condiciones para encontrar empleo.
Esto es consistente con el estancamiento del empleo asalariado registrado en el 3T 2013. Así, la moderada recuperación de la confianza empresarial observada recientemente aún no se traduce en mejoras significativas en el ritmo de contrataciones.