Uno de los casos más exitosos y llamativos en el segmento de consumo discrecional en la última década es el de Starbucks, que cuenta con una inteligente estrategia de expansión internacional y que, además, con líneas de negocio que implican atractivas oportunidades de crecimiento tanto a mediano como a largo plazo.
La firma comenzó con seis locales ubicados en la ciudad de Seattle en 1986 y, desde ese entonces, ha crecido hasta convertirse en un verdadero gigante de la industria del café con más de 18.000 en todo el mundo.
Su titular, Howard Shultz, es conocido por su atención a los detalles. Por eso, los valores que representa su marca, el diseño y la decoración de sus tiendas e, incluso, cuestiones que pueden parecer secundarias, como los efectos que determinados productos tienen sobre el aroma que se respira en ellos, han sido factores sobre los que ha trabajado a lo largo de los años para diferenciar a Starbucks de sus competidores, algo que perciben sus clientes.
Gracias a esto pudo ser exitoso a pesar del aumento de la presión que ha enfrentado en los últimos años de parte de otras empresas, como Mc Donald´s que se están volcando al rubro del café con precios más bajos.
El negocio de Starbuks sigue mostrando muy buena salud. Sus ventas se incrementaron un 11% en el último trimestre frente al mismo período de 2012, mientras que su facturación en tiendas comparables creció un 6%. Los resultados hablan a las claras de su capacidad para sostener los niveles de precios y rentabilidad a pesar de la competencia, y lo viene logrando ya que sus ingresos operativos subieron un 26%, mientras que sus ganancias por acción lo hicieron un 20%.
Además, incrementó sus beneficios estimados para el año desde un rango de entre 2,06 y 2,15 dólares por acción a entre 2,12 y 2,18, lo que estaría indicando buenas perspectivas para lo que queda de 2013.
India y Brasil son lugares de gran valor estratégico para su programa de crecimiento en los próximos años. Esto aún se encuentra en su fase inicial, por lo que si logra obtener tasas de éxito similares a las de otros países emergentes, podría estar frente a una oportunidad de magnitud considerable en el mediano y largo plazo. Además de la expansión internacional, está implementando una serie de iniciativas para seguir ampliando sus mercados. En diciembre, adquirió la compañía de té especializado Teavana por 620 millones de dólares en efectivo, lo que le servirá para adaptarse a los gustos de los consumidores en China e India.
A su vez, ha lanzado su propia máquina de café y, también cuenta con una alianza con Green Mountain Coffee Roeasters (GMCR) para proveer las capsulas que se utilizan en los equipos de esta compañía. Sus acciones cotizan a un ratio precio/ganancias (P/E) cercano a las 25 veces sus resultados estimados para el próximo año, lo que implica una valuación relativamente elevada que refleja su calidad y su potencial de crecimiento pero, también, la hace vulnerable a las caídas en caso de que su performance futura esté por debajo de las expectativas de los inversores.
Por eso, el valor objetivo estimado para los papeles de Starbucks es de 70 dólares frente a los 64,98 en los que se mueve en la actualidad y se recomienda la colocación de un stop loss por debajo de los 62.