Después de cinco años al frente de la presidencia ejecutiva, así como de la dirección general de Walmart México y Centroamérica, Scot Rank dejó su cargo el año pasado. Es el principio de los cambios que buscan desde la dirección hacer una diferencia en la operación del negocio.
En las primeras horas de 2015, Enrique Ostalé asumió el cargo que Rank había ocupado en los tiempos más difíciles de Walmart en el país mexicano: una investigación por presuntos actos de corrupción que comprendían la entrega de sobornos a funcionarios mexicanos para acelerar la apertura de tiendas en este país.
Hoy, el mayor reto no se encuentra en borrar la percepción de corrupción que ronda a Walmart, sino en revertir los efectos del bajo consumo que ha experimentado este país en los últimos dos años lo cual lo tendría en medio de una crisis silenciosa en el sector retail mexicano.
Es por ese motivo, que Walmart se prepara para dar una de las mayores luchas en el mercado minorista mexicano. Su principal oponente aparte del bajo consumo es el mal desempeño de Sam’s Club, su apuesta en el mercado de los clubes de precios, refiere Forbes México.
¿Cómo planean revertir este mal momento?
En mayo de 2014, la minorista concluyó la venta de Vips y el resto de su unidad de negocio enfocada a los alimentos por un monto de 8,200 mdp, pagados por Grupo Alsea, empresa que opera las franquicias de Starbucks, Domino’s Pizza y Burger King en México.
“Las ventas que ha realizado Walmart en los últimos meses (Vips y Banco Walmart), aunado a los cambios de directivos que ha efectuado, forman parte de una estrategia encaminada a vender las unidades de negocio que no son propias del retail. En este sentido, la próxima gran venta que se está cocinando es la de Suburbia”, asegura un analista financiero que pide el anonimato.
Asimismo, el pasado 18 de diciembre, Grupo Financiero Inbursa y la cadena de autoservicios anunciaron la adquisición de Banco Walmart por 3,570 millones de pesos.
“Estamos convencidos de que el dinamismo, innovación y cultura de servicio de Inbursa permitirá complementar lo anterior con una oferta competitiva de crédito en nuestros formatos de negocio, que ayude a incrementar la capacidad de compra de nuestros clientes y sea un motor adicional para incrementar nuestras ventas”, dijo Enrique Ostalé, presidente del consejo de administración de Walmart de México y Centroamérica.
El último movimiento de desincorporación que realizó Walmart fue descontinuar los servicios de Vudu, una oferta de contenidos de video bajo demanda a partir del 1 de febrero.
Los usuarios actuales de Vudu serán dirigidos al servicio de Cinépolis Klic, con lo que Walmart se baja de la competencia con Netflix y Claro Video.
“Lo relevante de Walmart siempre ha sido la venta de retail, y si vuelven a centrarse en ese negocio está bien”, explica Francisco Guzmán, analista senior de Grupo Financiero Interacciones.
Alternativas para crecer
Sam’s Club es el proyecto que no termina de despegar para Walmart México. La guerra entre los clubes de precios no entrega un saldo positivo para la empresa que dirige Ostalé. Ésta es la piedra en el zapato que aqueja la operación.
Costco es el principal oponente en este segmento de negocio, pero tiendas departamentales como Liverpool y El Palacio de Hierro son los otros guerreros con los que compite el club de precios de Walmart, asegura Verónica Uribe, analista de Grupo Financiero Monex.
La empresa podría iniciar una estrategia basada en el aumento en su número de sucursales, pero es una opción difícil de concretar agresivamente por la competencia en el mercado, así como apostar decididamente en el comercio electrónico a través de su página en Internet. Éste puede ser el as bajo la manga del minorista para crecer.
“La empresa se está centrando en las ventas por Internet, y eso representa que buscaría una serie de innovaciones para crecer con las nuevas formas de comercio”, opina el analista de Grupo Financiero Interacciones, quien ve posibilidades de que Walmart se vuelva líder en el segmento electrónico.
El año pasado, Walmart tuvo un crecimiento en sus ventas de tan sólo 3.6%, mientras que la expectativa de la compañía era de 4.1%. Incluso, si se compara el indicador a mismas tiendas (aquellas con más de un año de operación) las ventas muestran un descenso de 0.2% en 2014.
Por el momento, los analistas consultados esperan que el consumo se mantenga débil durante la primera mitad del año, aunque con previsiones favorables para el segundo semestre de 2015.