Luego de 15 meses de intensas negociaciones, Alicorp llegó a un acuerdo con la transnacional Nestlé (dueña de D’Onofrio) para transferirle los activos relacionados con la producción y comercialización de helados que posee en el Perú. La transacción, que se cerró el jueves pasado, puso fin a la ‘guerra fría’ que se inició en enero del 2004, luego de que la empresa del Grupo Romero decidiera comprar la marca Lamborghini (hoy sin h) para competir con el hasta entonces líder indiscutible de la categoría.
Aunque ambas compañías evitaron hacer comentarios sobre la transacción, trascendió que Nestlé Perú se habría hecho de aproximadamente 17.000 congeladoras, 4.000 triciclos y tres líneas de producción; y que como parte del acuerdo la compañía de alimentos se habría comprometido a no participar activamente en este negocio por un período de cinco años. Alicorp aún sigue siendo propietaria de la marca Lamborgini pues la operación involucró únicamente la venta de activos.
Por otro lado, Liliana Alvarado, directora del Área Académica de Marketing de la Escuela de Posgrado de la UPC,indicó que la compra de Lamborgini hizo que Alicorp se desviará de su negocio, por lo que no obtuvo buenos resultados. “Este es un rubro muy distinto, donde el competidor no está metido en la mente, sino en el corazón del consumidor. Eso hacía mucho más difícil la competencia, pues Lamborgini no era una marca muy conocida. Quizá si hubiera trabajado el concepto de que era una marca peruana le hubiera ido mejor”, añadió.