Amazon busca nuevas alternativas para enfrentar la caída del e-commerce. Con la presencia del COVID-19 el comercio electrónico se aceleró considerablemente. No obstante, luego de dos años de fuerte crecimiento, los expertos aseguran que hay un gran retroceso de las ventas en línea debido a que ha comenzado a recuperarse el comercio físico. De hecho, el Shopping Index de Salesforce, que analiza las tendencias de compra del mercado a partir de mil millones de consumidores en todo el mundo, apunta que el comercio electrónico ha experimentado una desaceleración global del 3%.
Los ingresos de Amazon durante el primer trimestre del año experimentaron un crecimiento del 7%, una cifra muy inferior al 44% alcanzado durante el mismo periodo de 2021.
Ante este panorama de pérdidas, el gigante del e-commerce estadounidense ha impulsado diversas acciones o estrategias. A principios de 2022, Amazon impuso un recargo del 5% a sus vendedores de Estados Unidos que usan el servicio de almacenaje, empaquetado y distribución, con el objetivo de compensar por el alto precio de la gasolina y la elevada inflación del país norteamericano.
Asimismo, la compañía incrementó los planes de membresía de Amazon Prime, en concreto la empresa excluyó la tarifa anual de su servicio de suscripción en US$20 a US$139. Además, también ha detenido la construcción de almacenes con una superficie de más de 9 millones de metros cuadrados.
Ahora, Amazon prepara una operación inmobiliaria ante los signos de la insipiente crisis económica que está afectando al comercio electrónico. Para compensar el retroceso en el sector, Amazon alquilará parte de sus instalaciones, lo que también le permitirá equilibrar sus cuentas.
En este sentido, el gigante del e-commerce comienza a apostar por el alquiler de espacios infrautilizados en sus almacenes para buscar una mayor rentabilidad, pues luego de dos años de expansión de su red de distribución, duplicando el espacio de almacenamiento, Amazon reveló que cuenta con superficies infrautilizadas y no consigue rentabilizar algunas de estas inversiones.
Para justificar la decisión de alquilar parte de sus almacenes, Brian Olsavsky, director financiero de Amazon, afirmó que tienen “demasiado espacio” en comparación con los patrones de demanda.
En sí, Bloomberg detalló que las instalaciones implicadas en la operación se encuentran en Nueva York, Nueva Jersey, Georgia y California. Con ello busca compensar la situación que vive la división de comercio electrónico en Norteamérica donde los márgenes son negativos desde finales del pasado año.