AmazonFresh, el negocio de alimentación del gigante de comercio electrónico, sigue conquistando nuevos mercados en Estados Unidos y tras desembarcar en Nueva York hace un mes, ahora llega a la gran urbe de la Costa Este americana: Filadelfia.
Inicialmente el servicio alimentario de Amazon está disponible sólo en algunos distritos del centro de la ciudad. Además, su uso se limita a los miembros Prime de Amazon, es decir aquellos que pagan 99 dólares al año por un servicio de envíos de dos días (2 ‘day shipping’) gratis.
Filadelfia se suma así a los otros grandes mercados donde está presente AmazonFresh: Los Ángeles, San Francisco, San Diego, Seattle y Nueva York.
Miran Europa
La creciente expansión de este servicio a diversas ciudades estadounidenses ha supuesto un gran avance en la logística de la empresa, por lo que ahora se plantean entrar en el mercado europeo, concretamente, en Alemania.
Salvo en el Reino Unido, que cuenta con dos empresas metidas de lleno en la comercialización online de productos frescos (Ocado y Tesco) el resto de países europeos se muestra reacio a adentrarse en este terreno, al no contar con la logística adecuada para hacer frente tanto a los pedidos como a las condiciones mínimas necesarias para que los productos permanezcan frescos a la hora de enviarse y a la hora de recibirse.
Incluso el periódico Bild ha hecho eco de la noticia, aventurando que directivos procedentes de Amazon Deutschland se habrían desplazado hasta la ciudad de Seattle para adquirir todos los conocimientos y la información necesaria que este ambicioso proyecto trae consigo.
Este gran gigante del comercio electrónico lleva reinventando su negocio desde que salió a bolsa en 1997.