La compañía de moda American Apparel que se acogió a la protección de bancarrota en los Estados Unidos la semana pasada, estima que llegaría a ser nuevamente rentable en el 2018.
La compañía con sede en Los Ángeles prevé que su plan de reorganización- diseñado para cubrir grandes deudas y pagos de intereses- ayudará a convertir su negocio en rentable en alrededor de tres años, según un documento presentado el jueves en el Tribunal de Quiebras en Delaware.
Cabe recordar que American Apparel ha sufrido pérdidas netas por un total de casi $ 384 millones en los últimos 5 años. Pero en virtud de su plan, la compañía dijo que su utilidad neta sería de $ 6 millones en el 2018. Y para el 2020, American Apparel estimó que tendrían una ganancia de $ 23,7 millones.
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ACUERDO CON ACREEDORES
El fabricante de ropa y venta por menor dijo la semana pasada que había llegado a un acuerdo con el 95% de sus acreedores garantizados. Si se aprueba, el acuerdo de reestructuración entregaría casi el 100% del control de sus tenedores de bonos más grandes, dejando de lado a accionistas como el derrocado presidente ejecutivo Dov Charney.
Charney aún podría retrasar – o incluso posiblemente descarrilar – las actuaciones en Tribunal de Quiebras, dijeron los expertos. Charney fue despedido el año pasado después de una investigación sobre la presunta conducta inapropiada y mal uso de fondos de la compañía. Sin embargo, Charney ha negado las acusaciones.
American Apparel advirtió el jueves que Charney podría seguir siendo un riesgo para el negocio. La compañía ya ha “incurrido en gastos sustanciales” en relación con Charney, incluyendo investigaciones sobre su comportamiento y demandas que ha interpuesto contra American Apparel.
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