“Los inspectores ya empezaron a desembarcar en grandes supermercados para verificar el cumplimiento de la Ley de Góndolas. De esa manera, la secretaría de Comercio Interior busca reforzar el nuevo esquema puesto en marcha el fin de semana para ampliar la oferta de productos y contener la inflación”.
“El sábado ya comenzaron las facultades para que la secretaría fiscalice y esta semana empezaron los relevamientos a modo de prueba piloto en los supermercados que tienen que adecuar sus góndolas”, confirmaron fuentes del área a cargo de Paula Español.
Las bocas de expendio de más de 800 metros cuadrados tuvieron tiempo hasta el sábado para aplicar la nueva disposición que ordena la exhibición de manera uniforme de todos los productos y la señalización destacada de aquellos de menor precio por unidad de medida.
La intención -dicen en Comercio- es estimular la “competencia” y el “trato igualitario” entre proveedores en los formatos medianos e hipermercados. “Recibimos varias visitas e inspecciones para ver nuestras tiendas y hemos tenido el visto bueno de parte de las autoridades”, señalaron en Coto.
La medida contempla que los locales de mayor facturación deberán contar al menos con cinco proveedores distintos por cada categoría de productos. Las empresas no pueden superar el 30% del espacio de exhibición, un 25% es para las micro, pequeñas empresas, y un 5% para la economía popular.
En medio de las dificultades para controlar la inflación, Español adoptó un alto perfil a través de los controles a fabricantes de alimentos y supermercados, la amenaza de cierre de exportaciones de carne (que finalmente se concretó) y multas a grandes firmas por presuntos sobreprecios.
Ahora, la funcionaria vinculada a Axel Kicillof lanzó los primeros relevamientos a modo de “prueba piloto” en las cadenas que deben adecuar sus góndolas.
“No es solo una nueva disposición de productos, sino que implica una reformulación de todo el proceso de comercialización desde la selección de proveedores, pasando por la logística y otros muchos procesos internos”, dijo Juan Vasco Martínez, titular de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU).
El impacto más notorio es la menor presencia de marcas líderes y más productos regionales y marcas propias, informaron en Walmart. La normativa también regula los pagos a proveedores, obliga a informarles sobre el faltante de stock y prevé multas de hasta $ 550 millones por incumplimientos.
“Dicen que con esto no van a ser necesarios los Precios Máximos. Si piensan que congelando precios de la construcción, alimentos y alquileres, se baja la inflación, ¿por qué no sacan un decreto que congele todo? Quieren inventar la pólvora”, se quejó el ejecutivo de una multinacional.