AstraZeneca planteó una defensa contra la oferta de compra de la estadounidense Pfizer por US$ 106,000 millones, proyectando un incremento de sus ingresos del 75% en la siguiente década, aunque solo después de una caída a corto plazo.
Con nuevos medicamentos prometedores que incrementarían sus ventas anuales a más de US$ 45,000 millones para el 2023, desde los US$ 25,700 millones del 2013, AstraZeneca informó que vender la compañía ahora al grupo estadounidense privaría a sus inversores de enormes ganancias.
“El éxito increíblemente visible de nuestra estrategia independiente resalta las perspectivas futuras de nuestros accionistas”, dijo el presidente de la empresa Leif Johansson.
AstraZeneca rechazó tres ofertas de compra de Pfizer, que busca crear la compañía farmacéutica más grande del mundo mediante la compra del grupo, aun cuando enfrenta un declive en los ingresos en los próximos tres años, porque los medicamentos más antiguos pierden la protección de patentes.
La compañía dijo que prevé un crecimiento “sólido y consistente” del 2017 al 2023, impulsada por nuevos tratamientos para el cáncer, la diabetes, las enfermedades cardíacas y trastornos pulmonares.
“AstraZeneca está completando su transformación y ahora tiene el tamaño, enfoque y equipo adecuado para ofrecer una de las líneas de medicamentos más interesantes.”, dijo el presidente ejecutivo de la compañía, Pascal Soriot.
El grupo británico AstraZeneca no descartó llegar a un acuerdo con Pfizer, sin embargo, diversas personas familiarizadas con el asunto dijeron que la firma está dispuesta a negociar si hubiera una oferta más alta y convincente.
