Cada año aumenta entre 15 y 20 por ciento el número de metros cuadrados disponibles en este tipo de edificaciones, que van desde pequeñas plazas con establecimientos de servicios básicos hasta malls para tiendas de lujo, según CBRE México, consultora de servicios inmobiliarios y de comercialización.
Lyman Daniels, presidente de CBRE México, afirma que a pesar del deterioro del consumo prevaleciente desde 2013, existe confianza en una pronta recuperación de la economía de México.
Señaló que los grandes desarrollos comerciales ya no sólo se edifican en las principales ciudades de México como son DF, Guadalajara, Monterrey, Puebla y Querétaro.
“Hoy en día, cualquier ciudad que tenga entre 100 mil y 200 mil habitantes ya es atractiva para los desarrolladores, así como para las marcas, principalmente de tiendas de autoservicios y departamentales, que se van adaptando al tamaño del mercado”, mencionó.
La llegada de mayor inversión ante la implementación de las reformas estructurales, principalmente la energética, proyecta Daniels, ocasionará que la apertura de nuevas plazas comerciales se eleve en los próximos 10 años, especialmente en las zonas petroleras.
Elías Mizrahi, director de Relación con Inversionistas del Fideicomiso de Inversión en Bienes Raíces Danhos, uno de los principales desarrolladores de parques comerciales, coincidió en que el potencial de México para el desarrollo de estos inmuebles es todavía vasto.
“Hay datos que nos hablan de la penetración de las áreas comerciales según el tamaño de la población. En México es de apenas 0.2 metros cuadrados de espacio comercial por habitante, mientras que en Estados Unidos es de 2 y en Canadá de 1.
“Si bien es difícil alcanzar esas cifras por ser países desarrollados, sí nos indica que en territorio mexicano aún falta mucho por edificar”, comentó el directivo de Danhos.
Los grandes centros comerciales, afirmó, están sustituyendo a las plazas públicas como lugares de esparcimiento, pues éstos son vistos como espacios más seguros y limpios, lo que también impulsa su crecimiento.
Mizrahi admitió que las grandes tiendas departamentales, como Liverpool y Sears, así como las grandes cadenas de cines y los restaurantes se han convertido en los negocios anclas para los desarrollos comerciales, de tal suerte que si un espacio carece de marcas de ese tipo difícilmente generará un flujo de clientes relevante.