La compañía estadounidense Burger King anunció hoy la compra de la cadena canadiense Tim Hortons por más de 11.400 millones de dólares, con lo que formará la tercera empresa mundial de comida rápida.
La nueva compañía resultante de la fusión estará radicada en Canadá y con contará con más de 18.000 restaurantes en 100 países, con unas ventas que suman cerca de 23.000 millones de dólares en ventas, aunque cada una de las marcas se gestionara de manera independiente.
“Durante los últimos cuatro años, hemos transformado Burger King en uno de los restaurantes de comida rápida más rentables del mundo a partir de un crecimiento internacional, un foco constante en la revitalización de la marca y compromiso con nuestras franquicias”, explicó Daniel Schwartz, jefe ejecutivo de Burger King, en un comunicado.
La operación permitirá establecer el domicilio fiscal de la compañía en Canadá, lo que rebajará sustancialmente el pago de impuestos y es de prever que genere polémica en EE. UU., donde se han criticado movimientos similares de otras grandes empresas para reducir pagos fiscales.
“Estamos entusiasmados por construir en este progreso mientras continuamos expandiendo a Burger King en el mundo y esperamos con ganas trabajar y aprender de Tim Hortons mientras creamos juntos la compañía de restaurantes global líder en el mundo”, agregó.
Con ventas conjuntas anuales de 23 mil millones de dólares, más de 18 mil restaurantes en 100 países y dos marcas sólidas e independientes, el nuevo grupo contaría con amplia presencia internacional y gran potencial de crecimiento, dijeron ambas empresas en un comunicado.
Menos impuestos
Burger King Worldwide Inc. tendrá su sede en Canadá, país presentado como “el mercado más grande de empresa fusionada” y que además tiene la ventaja de que allí las empresas pagan menos impuestos que en Estados Unidos.
Los impuestos que se pagan en Canadá en promedio ascienden a 25.6%, que se compraran con el 40% que se paga en Estados unidos, de acuerdo con la firma de auditoría KPMG.
No obstante, Burger King resaltó que Miami seguirá siendo su casa mundial, mientras que Oakville, en Ontario, permanecería como sede global de Tim Hortons.
En Estados Unidos, Burger King está sujeta a una tasa fiscal del 35 %, mientras que en Canadá esa cifra se reduce al 15 por ciento. Burger King está controlada por el fondo de inversión brasileño 3G Capital Management.
Los accionistas de Tim Hortons recibirán 65.50 dólares canadienses en efectivo y 0.8025 acciones de la nueva compañía por cada título en propiedad, dijeron ambos grupos en un comunicado conjunto.
Las acciones del grupo fusionado cotizarán en las bolsas de Nueva York y Toronto.
Burger King ya tiene compromisos por 12 mil 500 millones de dólares para financiar la parte en efectivo de la operación, entre ellos un paquete de crédito de 9 mil 500 millones de dólares liderado por JPMorgan y Wells Fargo.
La nueva empresa tendrá a Daniel Schwartz, actual consejero delegado de Burger King, como consejero delegado, mientras que Alex Behring, director ejecutivo de Burger King, será el presidente y director ejecutivo. Por su parte, el consejero delegado de Tim Hortons, Marc Caira, será el vicepresidente.