Al parecer el 2018 no ha sido favorable para Amazon en el rubro de comestibles, ya que luego de la adquisición de Whole Foods Market, se pensaba que el e-commerce iba a potenciar su oferta para continuar creciendo en distintos mercados.
Un estudio publicado por UBS revela que aún debe trabajar más para crecer en la industria alimentaria. El número de usuarios que compraba comida ha caído de 17% en 2017 a 12% en 2018.
Este resultado no se esperaba, luego que Amazon invirtiera grandes sumas de dinero en el desarrollo de Whole Foods, así como la expansión del servicio de entrega de dos horas Prime Now para captar una mayor cantidad de consumidores y ampliar sus ventas.
Asimismo, la revista infoRETAIL indica que un estudio elaborado por Brick Meets Click refleja que los hogares que utilizan los servicios de entrega o recogida de productos de alimentación ofrecidos por los minoristas físicos gastan alrededor de 200 dólares al mes y hacen pedidos con más frecuencia que los usuarios de Amazon, cuyo gasto solo es de 74 dólares.
De igual manera, las inversiones de los minoristas en sus tiendas virtuales van a permitir que los hogares con opciones de entrega o recojo en tienda de alimentos comprados en internet llegue a 90% en 2019, frente a 69% de 2017.
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