El nuevo gobierno de Perú marca significativamente el inicio de un cambio político sin precedentes, pues el país había estado acostumbrado a un mandato de gobierno de centro-derecha a extrema derecha, pero con la llega de Pedro Castillo a la presidencia el tradicional mandato daría un giro importante, ya que sus ideales son izquierdistas.
En este sentido, los ideales del actual gobierno podrían generar cambios en el clima de riesgo regulatorio y político que enfrentarán las empresas durante los próximos años.
“El nuevo frente político de Perú probablemente signifique mayores riesgos para las empresas en forma de retórica antiempresarial, autoridades reguladoras más impredecibles, oposición de la comunidad y una relación de confrontación con funcionarios gubernamentales a nivel local, regional y nacional”, manifestó Claudia Navas, analista de riesgos y politóloga de Control Risks para Perú y la región andina.
Por esta razón, la analista de riesgos realizó el resumen de las cinco principales medidas que podrían afectar al mercado peruano y que las empresas deben analizar para seguir en funcionamiento durante la coyuntura.
Supervisión regulatoria y contractual más entusiasta:
Una administración populista emergente a menudo quiere enviar mensajes tempranos a sus votantes y lo hace a través de una extralimitación regulatoria. Navas explicó que esto puede suceder en forma de renegociaciones de contratos o regalías, medidas enérgicas regulatorias, revisiones de impuestos e incluso presión pública para que las empresas tomen o dejen de tomar ciertas acciones que afectan profundamente sus negocios.
Mayor retórica anti-empresarial
Un nuevo líder populista tiende a usar una postura significativa para hacer crecer su base política. Concéntrese en lo que hace la administración, no en lo que dice desde el principio. Esto puede cambiar en el futuro, pero no es aconsejable creer o preocuparse desde el principio por cada amenaza percibida que proviene de un movimiento populista en ascenso.
Posturas confrontacionales de comunidades y ONGs
En el caso de las nuevas administraciones de izquierda, las comunidades, las ONG y otros actores sociales pueden sentirse envalentonadas para adoptar una postura de confrontación hacia las empresas. La mejor forma de manejar estas situaciones es involucrándose con estos actores de manera franca y respetuosa.
Campañas agresivas contra la corrupción
Las administraciones populistas tienden a emerger de la frustración con la percepción de irregularidades por parte de una clase política establecida. Al principio, espere ver campañas anticorrupción e incluso acciones inesperadas, y hasta injustas, contra otras posturas y “enemigos” políticos. “Esto podría representar una amenaza indirecta para las empresas que han tenido relaciones con actores políticos específicos” explicó la especialista de Control Risks.
Populismo legislativo
En el Perú no sólo el ejecutivo representa riesgos para los negocios, sino también el Congreso. El congreso peruano en los últimos años se ha caracterizado por aprobar medidas con implicaciones significativas para el sector privado y los mercados sin una socialización adecuada con partes interesadas en las industrias. Esta tendencia, que se exacerbó en el contexto de la pandemia, probablemente continuará. Legisladores continuarán impulsado medidas anti-técnicas o que rayan con el marco jurídico peruano como medio para capitalizar apoyo popular, o incluso desafiar el ejecutivo.
Sin embargo, Navas resalta que empresas e inversionistas en el Perú no deben esperar lo peor de inmediato. Si bien los movimientos políticos radicales suelen tener agendas bien establecidas, al principio deben mostrar pragmatismo porque a menudo carecen del dinero, los recursos y el control de las instituciones que son necesarios para avanzar.
Esto puede abrir oportunidades para la cooperación de los sectores público y privado que las empresas a menudo subestiman. Los gobiernos populistas pueden suavizar sus posturas si establecen, desde el principio, buenas relaciones de trabajo con empresas prácticas e inteligentes.
En este sentido, Claudia Navas señala la importancia de la creación de escenarios personalizados y planes de acción de contingencia que permitan adelantarse a los acontecimientos.