Los productores peruanos de calzado escolar ya no tienen grandes expectativas en el desarrollo de la campaña escolar, puesto que en los últimos años la vestimenta para asistir a los colegios públicos ahora es flexible, es decir, muchas entidades educativas ya no exigen un uniforme o calzado específico para que los niños y adolescentes puedan ir a clases.
Asimismo, debido a la pandemia muchos fabricantes de calzado no se han reactivado y otros han cambiado de giro. Hay que recordar que durante años los días previos al regreso a clases representaba una etapa importante de ingresos económicos para el sector debido a que los calzados eran altamente demandado para complementar el uniforme.
Ismael Zanabria, representante de la Cámara Peruana de Cuero, indicó a Gestión que la flexibilidad en la vestimenta y el contexto pandémico generó la casi desaparición de la campaña escolar para los productores de calzado. Destacó que ya no cuentan con la misma demanda que tenían en el pasado cuando el uniforme en las escuelas públicas era obligatorio y se vendían, al menos, 4 millones de pares en todo el país.
Asimismo, señaló que antes e la presencia del COVID-19, los estudiantes ya se dirigían al colegio con un calzado deportivo. También refirió al medio que algunas medianas y pequeñas empresas fabricaban zapatos escolares para colegios particulares, pero que con tan solo esos ingresos no se pueden estimar una campaña significativa para el sector.
Por otra parte, el representante de la Cámara Peruana de Cuero mencionó que el producto sustituto para los productores fueron las zapatillas. No obstante, reveló que los consumidores prefieren comprar un calzado de marca como los que se venden en las tiendas minoristas, dejando a un lado la producción nacional a pesar de que estén hechos con la misma calidad.
El representante también lamentó que el 60% de la demanda de calzado sea importado, mientras que solamente el 40% es de fabricación nacional.
Impacto pandémico
Zanabria explicó que la presencia del COVID-19 golpeó aún más al sector nacional que ya previamente venía siendo afectado por los productos importados. “Se dejó de producir alrededor de 40 millones de pares de zapatos y esto ha generado 200 mil empleos perdidos. Hoy en día, de las 7.500 mypes a nivel nacional, solo 500 sobreviven por los programas sociales que hay en la Policía Nacional, Fuerzas Armadas, y su capacidad de producción está a un 30%”, puntualizó.
Una propuesta diferente
Vladimir de la Roca Morán, presidente de la Cámara de Producción del Cuero y Calzado de La Libertad, declaró para el medio que los fabricantes peruanos están dejando de apostar por el calzado escolar tradicional y están tratando de innovar con un zapato multifuncional que sean más dinámico, es decir, que no solo se pueda usar para ir al colegio.
Morán analiza que esta puede ser una oportunidad de reactivación para el sector. Los empresarios están viendo la manera de ofrecer este calzado al Estado para su distribución a los beneficios del programa social Qali Warma.
“Nosotros pedimos al Gobierno (de Martín Vizcarra) para que a través del Programa Compras Myperú, podamos abastecer de calzado a Qali Warma con más de 4 millones de pares, pero no tuvimos respuesta en su momento. Creemos que ahora es cuando esto debe ser evaluado, a fin de reactivar a las mypes de calzado a nivel nacional” dijo el ejecutivo, citó Gestión.