La suspensión de las actividades de los 850 restaurantes que McDonald’s tiene en Rusia a causa de la invasión de a Ucrania causó un frenesí en ese país. En las última horas se viralizaron imágenes de las largas colas que se formaron afuera de varias sucursales de la cadena de hamburguesas y hasta se están subastando en internet sus productos a precios inimaginables.
En medio de una fuerte presión internacional, la compañía se acaba de sumar a otros gigantes como Coca Cola, Pepsi y Starbucks en el boicot contra las acciones del gobierno de Vladimir Putin y decidió cerrar sus puertas por tiempo indeterminado. McDonald’s, que en buena parte del mundo trabaja con un esquema de franquiciado, es dueña del 84% de los locales en Rusia.
Tras el anuncio de cierre, se observaron en diversos puntos de venta de la empresa largas colas de clientes, quienes estaban ansiosos por consumir por última vez los productos de la cadena de comida rápida.
Además, se viralizaron imágenes de sitios web de subastas donde algunos usuarios rusos vendían combos por entre 40.000 y 50.000 rublos (entre 307 y 384 dólares, respectivamente). Antes de la crisis, el precio de estos combos promediaba los 355 rublos (poco menos de 3 dólares).
A través de un comunicado, McDonald’s reveló que el creciente aislamiento de Rusia de la comunidad internacional había desatado problemas en su cadena de suministro y sostuvo que le resulta “imposible predecir” cuándo volverá a abrir sus puertas en Rusia.
Cabe señalar que McDonald’s desembarcó en Moscú en 1990, poco después de la caída de la Unión Soviética. A nivel nacional, emplea alrededor de 62.000 personas que seguirán percibiendo su sueldo mientras dure la suspensión. Sus casi 850 locales, sumados a los 108 que regentea en Ucrania, representaron el 9% de sus ingresos al cierre de 2021.
La suspensión de las actividades de los 850 restaurantes que McDonald’s tiene en Rusia a causa de la invasión de a Ucrania causó un frenesí en ese país. En las última horas se viralizaron imágenes de las largas colas que se formaron afuera de varias sucursales de la cadena de hamburguesas y hasta se están subastando en internet sus productos a precios inimaginables.
En medio de una fuerte presión internacional, la compañía se acaba de sumar a otros gigantes como Coca Cola, Pepsi y Starbucks en el boicot contra las acciones del gobierno de Vladimir Putin y decidió cerrar sus puertas por tiempo indeterminado. McDonald’s, que en buena parte del mundo trabaja con un esquema de franquiciado, es dueña del 84% de los locales en Rusia.
Tras el anuncio de cierre, se observaron en diversos puntos de venta de la empresa largas colas de clientes, quienes estaban ansiosos por consumir por última vez los productos de la cadena de comida rápida.
Además, se viralizaron imágenes de sitios web de subastas donde algunos usuarios rusos vendían combos por entre 40.000 y 50.000 rublos (entre 307 y 384 dólares, respectivamente). Antes de la crisis, el precio de estos combos promediaba los 355 rublos (poco menos de 3 dólares).
A través de un comunicado, McDonald’s reveló que el creciente aislamiento de Rusia de la comunidad internacional había desatado problemas en su cadena de suministro y sostuvo que le resulta “imposible predecir” cuándo volverá a abrir sus puertas en Rusia.
Cabe señalar que McDonald’s desembarcó en Moscú en 1990, poco después de la caída de la Unión Soviética. A nivel nacional, emplea alrededor de 62.000 personas que seguirán percibiendo su sueldo mientras dure la suspensión. Sus casi 850 locales, sumados a los 108 que regentea en Ucrania, representaron el 9% de sus ingresos al cierre de 2021.
La suspensión de las actividades de los 850 restaurantes que McDonald’s tiene en Rusia a causa de la invasión de a Ucrania causó un frenesí en ese país. En las última horas se viralizaron imágenes de las largas colas que se formaron afuera de varias sucursales de la cadena de hamburguesas y hasta se están subastando en internet sus productos a precios inimaginables.
En medio de una fuerte presión internacional, la compañía se acaba de sumar a otros gigantes como Coca Cola, Pepsi y Starbucks en el boicot contra las acciones del gobierno de Vladimir Putin y decidió cerrar sus puertas por tiempo indeterminado. McDonald’s, que en buena parte del mundo trabaja con un esquema de franquiciado, es dueña del 84% de los locales en Rusia.
Tras el anuncio de cierre, se observaron en diversos puntos de venta de la empresa largas colas de clientes, quienes estaban ansiosos por consumir por última vez los productos de la cadena de comida rápida.
Además, se viralizaron imágenes de sitios web de subastas donde algunos usuarios rusos vendían combos por entre 40.000 y 50.000 rublos (entre 307 y 384 dólares, respectivamente). Antes de la crisis, el precio de estos combos promediaba los 355 rublos (poco menos de 3 dólares).
A través de un comunicado, McDonald’s reveló que el creciente aislamiento de Rusia de la comunidad internacional había desatado problemas en su cadena de suministro y sostuvo que le resulta “imposible predecir” cuándo volverá a abrir sus puertas en Rusia.
Cabe señalar que McDonald’s desembarcó en Moscú en 1990, poco después de la caída de la Unión Soviética. A nivel nacional, emplea alrededor de 62.000 personas que seguirán percibiendo su sueldo mientras dure la suspensión. Sus casi 850 locales, sumados a los 108 que regentea en Ucrania, representaron el 9% de sus ingresos al cierre de 2021.
La suspensión de las actividades de los 850 restaurantes que McDonald’s tiene en Rusia a causa de la invasión de a Ucrania causó un frenesí en ese país. En las última horas se viralizaron imágenes de las largas colas que se formaron afuera de varias sucursales de la cadena de hamburguesas y hasta se están subastando en internet sus productos a precios inimaginables.
En medio de una fuerte presión internacional, la compañía se acaba de sumar a otros gigantes como Coca Cola, Pepsi y Starbucks en el boicot contra las acciones del gobierno de Vladimir Putin y decidió cerrar sus puertas por tiempo indeterminado. McDonald’s, que en buena parte del mundo trabaja con un esquema de franquiciado, es dueña del 84% de los locales en Rusia.
Tras el anuncio de cierre, se observaron en diversos puntos de venta de la empresa largas colas de clientes, quienes estaban ansiosos por consumir por última vez los productos de la cadena de comida rápida.
Además, se viralizaron imágenes de sitios web de subastas donde algunos usuarios rusos vendían combos por entre 40.000 y 50.000 rublos (entre 307 y 384 dólares, respectivamente). Antes de la crisis, el precio de estos combos promediaba los 355 rublos (poco menos de 3 dólares).
A través de un comunicado, McDonald’s reveló que el creciente aislamiento de Rusia de la comunidad internacional había desatado problemas en su cadena de suministro y sostuvo que le resulta “imposible predecir” cuándo volverá a abrir sus puertas en Rusia.
Cabe señalar que McDonald’s desembarcó en Moscú en 1990, poco después de la caída de la Unión Soviética. A nivel nacional, emplea alrededor de 62.000 personas que seguirán percibiendo su sueldo mientras dure la suspensión. Sus casi 850 locales, sumados a los 108 que regentea en Ucrania, representaron el 9% de sus ingresos al cierre de 2021.