La difícil situación que atraviesa el vecino país del sur debido a las manifestaciones por el alza del valor del pasaje del Metro y otros problemas sociales han obligado a centros comerciales, supermercados, tiendas por departamento y otros comercios menores a cerrar sus locales para proteger sus artículos en venta.
El último fin de semana, tras el toque de queda en la región de Santiago y otros puntos del país, cientos de personas irrumpieron en las principales tiendas del centro de la capital. Las cámaras de los principales medios de comunicación de Chile registraron los saqueos en las tiendas departamentales de Ripley y Falabella.
En dichos saqueos, varios grupos de personas televisores, laptops y otros productos tecnológicos y otra mercadería. Mientras ocurrían los robos, dejaron destrucción a su paso, publicó Diario Financiero.
Por su parte, el grupo minorista Cencosud indicó que cuenta con los protocoles frente a cualquier situación anómala en sus centros comerciales y tiendas de retail, pero todavía han sido necesario activarlos. Sin embargo, en Costanera Center, algunos locales ya estaban cerrando.
En tanto, Mallplaza está funcionando con normalidad, aunque de forma voluntaria las tiendas en el interior podrían cerrar a las 20 horas en todo Santiago. Mientras tanto, en sedes de la cadena de supermercados de Walmart se han registrado actos violentos y saqueos.
En comercios y cadenas de farmacias ubicados en las zonas aledañas a los metros afectados por los actos de violencia cerraron sus puertas pasada las 19 horas.
Durante el último fin de semana se registraron actos violentos en la capital de Santiago debido al alza de pasajes en el Metro y otros problemas sociales.
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