La popularización de los dispositivos móviles, especialmente los smartphones, y de las redes sociales, ha cambiado la forma en la que los consumidores interactúan con las marcas.
Por ello, el retailer deberá apoyarse en cinco pilares fundamentales en los que la tecnología jugará un papel fundamental para revitalizar el negocio.
- La reinvención de la tienda física, para mejorar la experiencia del cliente.
- La geolocalización permite mejorar el uso de los recursos y del capital humano del retailer.
- Adopción de soluciones que permitan alinear las operaciones de back-end con el servicio de atención al cliente de front-end, haciendo uso de la tecnología en cada fase de la cadena de suministro.
- Mejorar el uso de los recursos y del capital humano del retailer manejando información histórica de la afluencia de usuarios y mapas de calor en tienda.
- Conocer qué tipo de productos tienen mejor aceptación en el mercado y optimizar la distribución del stock en los puntos de venta.
Además, la fusión de canales impulsada por el conocimiento del consumidor ha de ser un objetivo prioritario de los retailers, conectando los comportamientos de compra de los shoppers online y offline.
De la misma forma, la aceleración de pagos digitales a consecuencia de la pandemia va a impulsar algunas de las tendencias que están emergiendo en estos últimos meses y que se espera se mantengan en un futuro cercano.
Asimismo, los retailers han experimentado el incremento del uso de los pagos contactless del 45% desde el inicio de la pandemia, como resultado de una mayor necesidad de seguridad, conveniencia y confianza por parte del consumidor.