Wall Street Journal (WSJ) informó que según personas familiarizadas con el asunto, Revlon, la afamada firma dedicada a la fabricación de cosméticos, se está preparando para solicitar la protección del capítulo 11 de la ley de bancarrota de Estados Unidos.
De acuerdo con los medios estadounidenses, Revlon contemplará los trámites la próxima semana. Ante esto, las acciones del fabricante de cosméticos sufrieron una fuerte caída y se hundieron más de 50%.
WSJ la semana pasada señaló que la compañía inició conversaciones con los prestamistas antes de los inminentes vencimientos de deudas para tratar de alejar el negocio de la quiebra.
Cabe destacar que para finales del pasado mes de marzo Revlon tenía una deuda de largo plazo de US$ 3.310 millones.
A pesar de que la demanda de productos de maquillaje se ha recuperado debido a las menores restricciones de la pandemia, Revlon actualmente se enfrenta a la competencia de las marcas emergentes digitales.
En este sentido, la empresa ha luchado por mantener su relevancia y detener la caída de las ventas en medio de la competencia de Estee Lauder Cos y una variedad de empresas más pequeñas que utilizan las redes sociales para atraer a los clientes. Los problemas se agravaron después de que los confinamientos a causa del COVID-19 provocaran la caída de la demanda de maquillaje.
Además, en marzo la compañía había notificado que estaba siendo impactada por las limitaciones de la cadena de suministro. En este contexto, Reorg Research fue quien informó por primera vez que Revlon estaba planeando declararse en quiebra o bancarrota.