La preferencia de los peruanos por las prendas de alta costura se consolida, alentada por una mayor oferta. Gastar US$50.000 en trajes a la medida en la tienda Ermenegildo Zegna, ya no sorprende.
El crecimiento de la clase media en su conjunto provocó que el consumo de productos de lujo subiera 20% en el 2013 y 2014. Eso anima a un mayor número de marcas de alta costura a ingresar al Perú.
Así en el corto plazo se espera la llegada de Versace, Missioni y la marca de vestidos de novia Rosa Clará, por citar solo algunos ejemplos.
Elizabeth Bernales, Retail Manager de Dockers en el Perú, señala que el consumidor está cambiando y apuesta por la exclusividad, algo que han sabido aprovechar.
“Los ejecutivos están más familiarizados con las marcas de alta gama y las buscan”, afirma.
Carlos Landa, representante del departamento comercial de Salomon Perú, coincide con Bernales y agrega que los ejecutivos tienen un gran conocimiento, no solo de las marcas existentes en el mercado, sino también de cada producto que se ofrece, indica la nota del suplemento Dia_1.
El ticket promedio de prendas de vestir es de US$400. Aunque algunas firmas precisan que hay clientes que han llegado a desembolsar en una sola compra hasta US$115.000 en trajes a medida.
Expansión
Recientemente, la firma Deloitte elaboró un estudio en el cual identificó 75 compañías top del mundo, de las cuales unas 30 ya se encuentran en el Perú.
La consultora también definió entre los principales clientes a los ejecutivos extranjeros o peruanos que han regresado al Perú y que conocen y valoran la oportunidad de comprar estas marcas.
Según Deloitte, es esta apertura al mercado lo que genera que la alta costura incremente la demanda y mejore la competencia, llevando a que las empresas del sector desarrollen productos premium con materiales de alta calidad.
Ese es el caso de Samitex (John Holden), que en los últimos años ha concentrado parte importante de sus esfuerzos a mejorar la calidad de sus trajes y telas.
Según su jefa de Márketing Marieta Zevallos, los ejecutivos peruanos buscan diseños exclusivos en sus trajes. Se prevé que el mercado continuará creciendo. Eso es lo que ha animado a Dockers a iniciar su expansión al interior del país.
“El año pasado llegamos al Cusco y a través de córneres ya tenemos presencia en Arequipa, Piura, Chiclayo y Cajamarca, importantes nichos de empresarios” anota Bernales.
Esta noticia es auspiciada por: