La Corte Suprema de Chile ratificó las multas impuestas por la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) a tres ejecutivos sancionados por uso de información privilegiada en el caso de la fallida fusión D&S-Falabella.
Se trata de Vicente Aresti López, Eugenio Eben Aresti y Alejandro Irarrázabal Ureta.
La SVS impuso las multas, pero los afectados las impugnaron ante la justicia ordinaria, cuyos tribunales, incluida ahora la Corte Suprema, ratificaron las sanciones.
La sentencia fue dictada este jueves 10 de enero y señala que Hans Eben Oyanedel, quien en la época de los hechos era director de D&S, tuvo acceso a información privilegiada relativa a las negociaciones de fusión entre dicha empresa y Falabella, y que “no respetó los deberes de reserva y de no transmisión de información privilegiada que sobre él pesaban”.
El documento también precisa que antes del anuncio de fusión, las acciones de D&S se transaban a un precio promedio de US$0.49 por unidad, “valor al que los recurrentes las adquirieron, en tanto que después de anunciada la fusión éste se elevó a US$0.6, precio promedio que se observó en la venta de acciones efectuada el 18 de mayo de 2007 por los reclamantes”.
La resolución consigna que “las negociaciones fundamentales” se llevaron a cabo en un brevísimo lapso de tiempo.
Respecto a las relaciones de los implicados, el fallo de la Suprema consigna que en esa época Vicente Aresti tenía la calidad de Vicepresidente Ejecutivo de Empresas Tucapel S.A. y que Eben era director de la misma.
También señala que en esa época Alejandro Irarrázabal Ureta ejercía el cargo de gerente general de Empresas Tucapel y que Eugenio Eben Aresti era Gerente de Nuevos Negocios de la misma compañía.
“Entre los reclamantes existen evidentes relaciones de familia y sociales de relevancia, sin perjuicio de las profesionales y comerciales ya descritas”, argumentó el tribunal.