Las criptomonedas nacieron como una divisa descentralizada que se mantuviera lejos de situaciones como la inflación, y que actuaran como la moneda del futuro. Y si bien han tenido importantes avances, puesto que varios negocios han decidido asumirlas como formas de pago, la industria de las criptomonedas en general se encuentra sobreviviendo.
La economía criptográfica alcanzó su punto máximo en 2021, en plena pandemia cuando todos nos volcamos a la digitalización. En concreto, el valor de la industria alcanzó un estimado de 3 billones de dólares (US$ 3’000’000’000,000 o tres millones de millones de dólares) en noviembre del año pasado.
Hoy, según estima el medio CNBC, la industria apenas roza los 900 mil millones de dólares (US$ 900’000’000,000). Eso es una caída de aproximadamente el 70% año a año.
Esto se debió, en gran medida, a que la principal criptomoneda, Bitcoin, tocó su máximo histórico de 68,000 dólares el 12 de noviembre de 2021, desde que fue acuñada en 2008. Actualmente tiene un valor por debajo de los 17 mil dólares (16,900.50 al cierre de esta nota). Los analistas refieren que se han vuelto un activo igual o más especulativo que cualquier otro, colapsando durante este año al igual que las acciones de las tecnológicas más riesgosas.
Es contradictorio. Precisamente hace un año, los inversores veían en las criptomonedas la solución a todos sus problemas. Describían a Bitcoin como el futuro del dinero y a Ethereum como la herramienta de desarrollo más importante del mundo. En aquel momento, los NFT habían despegado como nunca y plataformas de intercambio como Coinbase cotizaban en cifras récords.
Sin embargo, todo eso ha quedado atrás. Desde entonces, la caída en los activos digitales ha sido brutal para los inversores.
Principales criptomonedas perdieron tres cuartas partes de su valor en un año
Además de Bitcoin, el resto de las criptomonedas en la industria no se salvó de la crisis. Algunas de estas por ejemplo son:
- Ethereum; pasó de valer 4,084 dólares en 2021 a 1,208 en 2022
- Terra Classic; de costar $43.96 a $0.00016
- Solana; redujo su valor de 200.82 dólares a $13.51
“Mirando hacia atrás ahora, la emoción y los precios de los activos claramente se estaban adelantando a sí mismos y cotizando muy por encima de cualquier valor fundamental”, señaló Katie Talati, directora de investigación de Arca, una firma de inversión enfocada en activos digitales. “Como la recesión fue tan rápida y violenta, muchos han proclamado que los activos digitales están muertos”.
Aunque Talati y otros analistas consideran que las criptomonedas se recuperarán eventualmente, la situación se ha vuelto un recordatorio para los inversionistas y compañías del por qué existe la regulación financiera.
Siguiendo la línea de lo mencionado al inicio, se suponía que Crypto (inglés) traería transparencia. Todas las transacciones en la cadena de bloques (blockchain) podrían ser rastreables. No se necesitarían instituciones centralizadas (bancos) porque existen los libros de contabilidad digitales para servir como la única fuente de verdad. “Esa narrativa se ha ido”, sentencia CNBC.
“Hablando por los bitcoiners, sentimos que estamos atrapados en una relación disfuncional con las criptomonedas y queremos salir”, dijo Michael Saylor, presidente ejecutivo de MicroStrategy, una empresa de tecnología que posee 130.000 bitcoins. “La industria necesita crecer y los reguladores están entrando en este espacio. El futuro de la industria son los activos digitales registrados que se negocian en bolsas reguladas, donde todos tienen la protección de los inversores que necesitan”.