La publicación del reglamento de la Ley de Alimentación Saludable trajo cuestionamientos de diversos sectores involucrados.
Por un lado, la industria afirma que la norma se hizo sin contar con un estudio técnico y, por otro, Aspec y el Colegio de Nutricionistas consideran que los plazos de adecuación, que el reglamento se prevé que sean de 39 meses, son excesivos.
Además, desde la Defensoría del Pueblo cuestionaron el reglamento de la Ley de Alimentación Saludable, pues considera que no se ajusta a lo que busca la norma aprobada en el 2013, pues El Poder Ejecutivo no ha considerado los parámetros recomendados por la Organización Mundial de la Salud – Organización Panamericana de la Salud (OMS-OPS) a los que se refiere expresamente la ley.
“En el mismo sentido, estaría excediendo la potestad de reglamentar la ley al condicionar la vigencia del citado reglamento a la aprobación de un manual de advertencias publicitarias no contemplado por la norma”, señalaron desde la institución.
El representante de la OMS en el Perú, Raúl González Montero afirmó que con los estándares del Minsa, la mayoría de productos alimenticios industriales tendrán advertencias de su contenido.
Y es que la Ley de Alimentación Saludable señala que en la etiqueta de estos productos debe ir la advertencia “alto en” (azúcar, grasas saturadas o sodio) y “evitar su consumo excesivo”.
Asimismo, González se mostró a favor de este tipo de etiquetado, pues consideró que los colores del “semáforo nutricional” pueden confundir a la población.
Según refiere el diario Gestión, la Organización Mundial de la Salud recomendó también reducir el tiempo de adecuación al reglamento de la Ley de Alimentación Saludable que se dio a las empresas industriales a solo 18 meses.
En relación con el plazo para el inicio de su vigencia, tratándose de derechos fundamentales (alimentación y salud), la Defensoría del Pueblo entiende que, si bien ninguna adecuación normativa puede ser automática, los plazos estipulados en el reglamento deben ser razonables ponderando primordialmente el interés superior de los niños, niñas y adolescentes.
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PRODUCTOS SELECCIONADOS
Respecto a los productos que llevarán estas advertencias, el congresista de Fuerza Popular Daniel Salaverry afirmó que el Minsa elaboró un estudio con una muestra de 600 productos procesados, en los que se precisa cuántos estarán obligados a mostrarlas en la primera etapa.
De este grupo, las galletas dulces serían las que tendrían que tener más advertencias, pues el 63% son consideradas altas en azúcar y el 71%, altas en grasas saturadas.
De la misma manera, el 54% de bebidas lácteas y yogures tiene alto contenido de azúcar, al igual que el 50% de los cereales que se consumen en el desayuno.