La figura del director de tienda ha cobrado importancia en los últimos años. El responsable de un comercio debe gestionar múltiples áreas dentro del establecimiento y de cara a la cadena comercial a la que pertenece, como si de una “pequeña empresa” se tratara.
Desde hace años venimos observando que las empresas de retail le dan cada vez más peso, importancia y envergadura a la posición de director de tienda. Es evidente que este puesto clave es la cara de la empresa hacia al exterior y el primer impacto de cualquier consumidor que se aventure a visitar un punto de venta.
Además, el buen hacer del director será delegado a sus empleados y, como consecuencia, a la excelencia en el servicio, ya sea para empresas de textil, cadena especializada, gran distribución o restauración & hostelería.
El director de tienda como enlace con la central
La forma de establecer una conexión fructífera y duradera con la central se canaliza a través del director de tienda.
El director tiene que ser la persona que conozca, entienda y viva la filosofía de la compañía. Será también el profesional que transmita la cultura de la empresa y los estándares dictados desde la central y que se asegure de que éstos se llevan a cabo, ya que hoy en día es muy importante homogeneizar el servicio en todos los puntos de venta de una misma empresa.
De esta manera, la experiencia de compra de un consumidor no variará, independientemente de que se encuentre en Europa o Sudamérica.
Adicionalmente, el director tiene un contacto directo con muchos de los departamentos de su empresa. Esta relación es de vital importancia ya que influye a muchos niveles tales como producto, marketing, finanzas, recursos humanos, compras, operaciones o expansión. En consecuencia, esta figura da mucha estabilidad y confianza a la empresa.
Las complejas funciones del responsable de tienda
El creciente compromiso que están tomando los directores de tienda con sus “pequeñas empresas” hace que sus cometidos se incrementen. A día de hoy, no funciona el vendedor senior muy comercial que vende cualquier cosa.
Las consultoras de selección, y por consiguiente el mercado, buscamos candidatos con formación, idiomas (indispensable en este sector), con fuerte gestión de equipos humanos. Además de todo esto, otras funciones que desarrolla un responsable de tienda son:
– Formar y reclutar empleados.
– Gestionar de cuentas de resultados con el control de los indicadores clave del negocio KPI´S.
– Tener buen conocimiento de producto.
– Trabajar como nexo entre central y trabajadores, y bajar información.
– Ser comercial y saber fidelizar a sus clientes.
– Disponer de conocimiento de mercado.
– Influir en el departamento de trade marketing, realización de folletos.
En definitiva, el perfil que se busca es mucho más complejo, ya que el director de tienda es un embajador de la marca.
Cumplir sus expectativas
En más del 50% de personas entrevistadas en el sector del retail, un candidato que se encuentra como director de tienda ha empezado su carrera profesional desde puestos de vendedor o similar.
Las esperanzas marcadas por un perfil como éste son la de comenzar en una multinacional como vendedor, demostrar buenas dotes y resultados, y de ahí ir promocionando dentro del punto de venta hasta llegar al puesto de director y gestionar una unidad de negocio en su totalidad.
El siguiente paso claro sería el de gestionar varias unidades de negocio para finalmente alcanzar el cargo de director de retail. Para esto hay que buscar empresas que apuesten por la promoción interna, que tengan buenos planes de formación y que valoren el producto que tienen internamente.