Los peruanos somos muy tradicionales en casi todas las categorías que consumimos. Los medios de pago que utilizamos para comprar fueron muy “clásicos” hasta antes del 2020. Pero, con la llegada del COVID-19 nuestro mercado se adaptó a la tecnología y los consumidores empezaron a utilizar cada vez más los métodos de pago digitales, como una manera de prevenir contagios y realizar pagos de una manera ágil y sencilla.
Revolución digital
Hasta el primer trimestre del 2020, el principal medio de pago era el efectivo, el 60% de los peruanos lo utilizaban como su medio “principal” de pago, hoy solo el 40% sigue considerándolo de esta manera, en su lugar, apareció una amplia variedad de alternativas que son cada vez mas utilizadas y le otorgan un dinamismo distinto al consumo, impactando de una manera mas fuerte en algunas industrias y en algunos canales de compra.
El consumidor peruano cambió
Para el 54% de peruanos, hablar de medios de pago digitales, como billeteras virtuales, tarjetas prepago, o links de pago se ha convertido en lo cotidiano, hoy 4 de cada 10 peruanos ya utiliza al menos uno de estos medios, creándose, a partir de esto, una oportunidad para que las marcas puedan enganchar con un mercado joven (18 a 34 años) y que miren mas allá de Lima (43% de consumidores viven fuera de la capital)
Se populariza
El peruano, en promedio, suele utilizar 3.5 medios de pago distintos y cada uno de ellos tiene un objetivo especifico de uso. Por ejemplo, el uso de las app de delivery suelen ser acompañado con medios de pago como las billeteras virtuales, la compra a través de redes sociales son pagadas a través de transferencias bancarias, mientras las compras por e-commerce utilizan con mayor frecuencia los links de pago.
Todo este crecimiento viene de la mano de un usuario que cada día “trabaja” mas con diferentes dispositivos, sobre todo con smartphones, “gadgets” con los que conviven y han logrado niveles de uso muy diversos, hoy, estos dispositivos permiten a los usuarios comprar diversas categorías, entre las que destacan los alimentos, ropa, calzado, mobiliario para el hogar y útiles de oficina, con mucha incidencia sobre todo entre mujeres de los NSE A y B entre los 35 a 44 años.
Las marcas deben entender que nuestro el consumidor peruano es mas complejo que hace un año atrás, que convertir a ventas también significa proveerlo de las herramientas para concretar la experiencia a través de los medios de pago que ya configuro a la medida de sus necesidades.