No quedan dudas respecto a que Internet ha revolucionado la forma en que nos relacionamos, y tales cambios también se han traspasado a las dinámicas de consumo. Los clientes han ido preferiendo las alternativas más rápidas y eficientes mientras la compra de bienes se traspasa a las pantallas de computadores y smartphones.
Así, la industria del retail se ha visto forzada a adaptarse a estas nuevas prácticas. Ante ello, Carrefour y Tesco, dos de los mayores retailers del mundo están optando por dejar atrás las grandes tiendas y en cambio moverse a locales más pequeños al mismo tiempo que apuntan al creciente mercado de las compras online. Los consumidores cada vez se resisten más a las grandes tiendas debido al alto precio del petróleo y porque no desean ser tentados con productos que no necesitan.
“En vez de dirigir capital hacia remodelaciones indulgentes, el dinero debiese ser gastado más inteligentemente en aumentar las funciones multicanales como click-and-collect, kioskos dentro de las tiendas y el e-commerce”, afirmó a Bloomberg la directora de investigación de Planet Retail, Natalie Berg. Es más, el e-retail seguirá creciendo en 2012, con un alza de 13% de acuerdo a datos de IMRG.
La británica Tesco, la tercera a nivel global, ha sido mucho más ágil para adaptarse a los cambios. La firma dejará de abrir hipermercados fuera de las ciudades para enfocarse también en los espacios más pequeños y en las compras online, según afirmó su director ejecutivo, Philip Clarke.