La sueca Electrolux anunció que comprará la línea de electrodomésticos de General Electric (GE) por US$3,300 millones en efectivo para duplicar las ventas en América del Norte y superar a su rival Whirlpool Corp.
Electrolux informó en agosto que estaba en conversaciones para comprar la línea y aprovechar un mercado en el que ha carecido de escala y que está creciendo más rápido que el de Europa.
“Las categorías Premium y de alta calidad de los electrodomésticos de GE complementan nuestras propias marcas icónicas y mejorará nuestra presencia en América del Norte”, explicó el presidente ejecutivo de Electrolux, Keith McLoughlin, en un comunicado.
Electrolux, que vende bajo marcas como Frigidaire, AEG y Zanussi, así como bajo su propio nombre, ya es el segundo más grande fabricante de electrodomésticos del mundo después de Whirlpool, pero tiene su posición más fuerte en el mercado de Europa.
“La adquisición, la más grande que hemos hecho, refuerza nuestro compromiso con el negocio de electrodomésticos y también ofrece a Electrolux la escala y la oportunidad de acelerar nuestras inversiones en la innovación y el crecimiento global.”
En el 2013, Europa occidental representó el 28% de las ventas del grupo; mientras que América del Norte fue el 32%. El crecimiento orgánico en América del Norte fue de 7%; mientras que en Europa fue del 0,4%.
La compra del negocio de electrodomésticos de GE- incluyendo cocinas, refrigeradores, aire acondicionado y calentadores de agua – duplicará con creces las ventas de Electrolux en el mercado estadounidense desde los US$4,5 millones que tenía en 2013.
El año pasado, el negocio de electrodomésticos de GE tuvo ventas de US$5.7 mil millones, el 90% de los cuales estaban en América del Norte, con ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización de US$390 millones en 2013.
Electrolux indicó que el acuerdo sería financiado por un crédito y que se llevaría a cabo una ampliación de capital que corresponde a aproximadamente al 25% de la ponderación tras la finalización de la adquisición.
Con la transacción, se espera generar un ahorro anual de alrededor de US$300 millones y tener un aumento de los beneficios desde el primer año.
Con este adquisición, el más grande de su historia, la firma sueca busca duplicar sus ventas en América del Norte y enfrentar a Whirpool, su mayor competidor en ese mercado.