Un trabajador utilizó la computadora de su centro laboral para enviar vía e-mail publicidad relacionada a la pequeña empresa que había creado. Su empleador lo despidió al enterarse del hecho.
Casos como estos, cada vez más frecuentes, han empezado a preocupar a la ministra de Trabajo, Manuela García, quien indicó que los empleadores no tienen asidero legal para determinar sanciones, razón por la cual el Ejecutivo ha enviado al Congreso un proyecto de ley para regular el uso de las herramientas de Internet en el trabajo.
“Es bueno que el empleador defina los límites para no tener después casos donde se le diga al trabajador que no puede utilizar el Twitter en horas de oficina, cuando no se conocen las reglas de juego”, señaló la titular del sector al diario “Gestión”.
Agregó que si el empleador no pone ninguna regla en cuanto al uso de las redes sociales como el Facebook y el Twitter, se supone que su uso es ilimitado.