Cada 24 de octubre se conmemora el “Día Internacional contra el Cambio Climático”, y se ha reconocido incluso por la ONU que la industria de la moda es la segunda más contaminante. En ese sentido, el gigante minorista Falabella comparte las acciones que realiza en Perú para reducir su impacto ambiental.
Presente en nuestro país desde 1995, la cadena de tiendas por departamento cuenta con 31 establecimientos dedicados a la venta de ropa, calzado, electrónicos y más. Desde hace ya algunos años ha asumido un compromiso de sostenibilidad con diversos ejes, un programa al cual denominó +VERDE.
A través de dicho programa, busca contribuir como organización a la reducción de su huella de carbono y la mitigación del impacto en el medio ambiente. Esa misma gestión sostenible acreditó 11 locales con la certificación LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental, certificado por el Consejo de la Construcción Verde de Estados Unidos). Dentro del total calificado se incluye al Centro de Distribución de Lurín.
De igual forma, la tienda en Real Plaza Puruchuco fue la primera en obtener la certificación LEED Gold a nivel corporativo. A la fecha, todas las tiendas generan ahorro en energía y agua, usando la iluminación LED y disipadores en los grifos en sucursales.
Cuentan con su Proyecto Circular Textil, por el cual Falabella invita a sus clientes donar sus jeans en desuso con el fin de darle un destino responsable. Según compartió la compañía, ya casi van 2000 jeans donados durante octubre a nivel nacional. Por otro lado, varias de sus líneas de productos cuentan con su propia etiqueta +VERDE.
El 59% de los residuos operacionales del minorista (plástico, papel, cartón, aparatos eléctricos y electrónicos) se destinan a procesos de reciclaje. Por todo lo anterior, logran gestionar una Medición de la Huella de Carbono en los alcances 1, 2 y 3 (directas, indirectas y las que produce la cadena de valor).
“¡Gracias a todo el equipo que trabaja detrás de esta gran organización! Falabella es +Verde”, acota la empresa.