Las empresas gastan grandes suman en servicios de control de seguridad; y de algún modo deben recuperar esa inversión.
De acuerdo con un estudio elaborado en México, el robo hormiga en dicho país incrementa incluso hasta en un 5% el precio final al consumidor en las tiendas de autoservicio y departamentales, derivado del pago de sistemas de seguridad y vigilancia contratados por las empresas para poder prevenirlo.
El director de la carrera de Negocios Internacionales del Tecnológico de Monterrey Campus Santa Fe, Manuel Valencia, aseguró que entre más controles y dispositivos de vigilancia se apliquen, los costos aumentan.
“Diversos estudios y análisis rigurosos señalan que de no existir el robo hormiga el precio final de los productos se podría reducir entre un 3% y 5% haciéndolo con ello más barato, es un hecho que los consumidores pagan esa seguridad”, indicó.
Por otro lado, añadió que el robo hormiga representa un alto costo y difícil de cuantificar. Por ejemplo, las empresas durante el 2011 invirtieron más de 10 millones de dólares en implementar medidas de seguridad y protección.