El mercado de lujo peruano está en proceso de maduración y una muestra de ello es la apertura de varias boutiques unimarca, indica Francisco Revelo, socio líder de Consumo Masivo en la consultora Deloitte.
Revelo explica que al entrar a un mercado, una marca de lujo opta primero por explorarlo abriendo espacios en centros comerciales o casas de lujo multimarcas.
“Cuando encuentran un mercado atractivo, pasan a tener una boutique independiente”, señala.
Los lugares de Lima que, por ahora, más reciben boutiques independientes son los centros comerciales del Jockey Plaza y Larcomar, y las calles Conquistadores y Dasso, entre las principales.
Yarina Landa del Castillo, gerenta general del Jockey Plaza, destaca que son el único centro comercial del país que tiene un ‘boulevard’ para marcas de lujo internacional, por ende, nuevas marcas de lujo migran hacia ese lugar, pues estarán cerca a tiendas de alto estándar, como Salvatore Ferragamo, Carolina Herrera, H. Stern, Casa Banchero, Emporio Armani, Plaza Vendome, Coach y Chanel.
Landa estima que las ventas en el ‘boulevard’ aumentaron 16% en el primer semestre, destacando las joyerías de lujo, que pueden vender unos US$2 millones anuales.
En el caso de los relojes, Jack Gomberof, de GyG Joyeros, indica que el 2013 abrieron tres boutiques: Tag Heuer, Breitling y Gucci, las que han sido muy exitosas, lo que los ha animado a abrir otras de Montblanc, Omega, Jaeger LeCountre y Chopard.
“Realmente hay mucho interés de parte de las marcas internacionales de tener boutiques monomarcas”, indica.
Proyecciones
El siguiente paso sería que alguna marca se anime a abrir una ‘flagship’, una tienda insignia, aunque eso requiere un mercado mucho más grande y maduro: De hecho, son contadas las ‘flagship’ en el mundo.