Por ello, algunas cadenas hacen uso del geomarketing: herramienta que permite analizar las distintas variables geográficas de una localización y prever, de alguna forma, el comportamiento del consumidor en determinadas áreas de la ciudad.
Según explicó el gerente general de Collect GfK, Max Purcell, se pueden analizar variables como competencia, potenciales clientes, de acuerdo con el público objetivo, universos económicos de los hogares, trabajadores, empresas y cercanía con la red de Metro.
“Uno va buscando lugares donde hay alta concentración de variables que son interesantes para el negocio que se busca construir”, puntualizó Purcell. Otra industria que también ha hecho uso del geomarketing es la inmobiliaria, donde variables -como son los efectos migratorios y redes de accesos viales-, resultan ser clave para levantar proyectos.
A juicio del especialista, en investigaciones de mercado una análisis de geomarkentig puede significar la muerte o el éxito de un negocio. “Son estudios de muy bajo costo para lo que significa la inversión”, agregó.