El Grupo Breca, antes conocido como Brescia, es un conglomerado empresarial de origen peruano nacido hace más de 130 años. Actualmente, tiene operaciones en el Perú y otros países de Latinoamérica, en los sectores de banca, seguros, retail, hotelería, minería, inmobiliaria y pesca.
La familia dueña de este conglomerado (los Brescia) es la más rica del Perú con un patrimonio de US$ 5.400 millones hasta 2022. Cabe preguntarse, ¿cómo se fundó este reconocido grupo empresarial?
La historia comienza con Fortunato Brescia Tassano, inmigrante italiano quien llegó al puerto del Callao en 1889. Como la mayoría de europeos que venían a América, Fortunato era de condición humilde. Su primer trabajo fue como ayudante de una tienda minorista, manejada también por un italiano. Sin embargo, en sus planes no estaba quedarse como ayudante, sino de armar tan pronto como fuera posible su propia empresa.
Lo primero que se le ocurrió fue el negocio de abastecer a las tiendas (muchas de ellas en manos de italianos), y dado que tenía cierta experiencia, decidió comprar algunas tierras que más adelante se convertirían en su mayor empuje empresarial.
De esta manera, el Grupo Breca tiene sus inicios en 1913 cuando Fortunato comenzó su propio negocio tras adquirir el fundo Miranaves (contiguo al puerto del Callao) para dedicarse a la explotación agrícola. En esas tierras se cultivaba hortalizas y se criaban vacas lecheras, convirtiéndose así en proveedor de los bodegueros.
Un par de años después la compañía se expandió con la compra del fundo Limatambo (en los actuales distritos de San Borja, San Isidro y Miraflores). En 1919, se casó con María Catalina Cafferata Peñaranda, hija del empresario minero y cónsul de Italia en Huaraz, Pedro Cafferata Battilana.
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María fue heredera de algunas minas en los valles de Chacas y Huaraz (Áncash). Sin embargo, pese a la oportunidad que representaba el negocio minero, Brescia prefirió mantenerse en el rubro en el que se encontraba, vendiendo esos negocios e invirtiendo las ganancias de su producción y mercadeo de granos en la adquisición de nuevas tierras.
En 1921 el matrimonio Brescia y Cafferata tuvo a su primer hijo, bautizado como Pedro, en honor al padre de Catalina, y entre 1925 y 1929 llegaron al mundo Ana María, Rosa y Mario.
Gobierno expropia tierras de Brescia
En 1928 el gobierno de Augusto B. Leguía le expropió parte del fundo Miranaves para la construcción de los almacenes y residencias de los trabajadores del puerto del Callao, lo cual revalorizó los terrenos circundantes (entre los que estaba la parte no expropiada del fundo Miranaves). Esto, más que una pérdida, representó para Fortunato una oportunidad para el negocio inmobiliario.
Posteriormente, en 1940 el gobierno de Manuel Prado Ugarteche le expropió parte de la hacienda Limatambo para construir un aeropuerto en Lima, produciéndose el mismo resultado que en la primera expropiación sufrida: la revalorización de sus terrenos circundantes y no expropiados.
Primer proyecto inmobiliario
En 1948, a través de la compañía Urbanizadora Jardín ─creada en 1946─ el Grupo Brescia Cafferata desarrolló su primer proyecto inmobiliario: la Urbanización Santa Marina, en el Callao. Después de cuatro décadas de acumulación de capital, la familia continuó adquiriendo tierras en Supe, Fortaleza, Barranca, Huacho, Naranjal y Chincha.
No obstante, a pesar del crecimiento del negocio inmobiliario, Fortunato no se animaba a alejarse totalmente del negocio agrícola, lo cual se confirma con el hecho de que su hijo Mario fue también enviado a estudiar agronomía. En 1952 fallece don Fortunato, quedando su hijo mayor Pedro como figura paterna y cabeza de los negocios. Además, su hermano Mario se convirtió en su apoyo y soporte. Ambos lograron la expansión y crecimiento de los negocios de la familia.
Los hermanos Brescia al frente diversificaron el negocio
Pedro y Mario decidieron darle fuerza al negocio inmobiliario, pero también buscaron nuevas oportunidades e inversión. Ingresaron al negocio pesquero mediante la adquisición de las empresas Tecnológica de Alimentos, Costa Mar e Indo Mar. Asimismo, su diversificación los llevó a desarrollar también el negocio minero, por lo que aprovecharon las canteras que heredaron de su abuelo materno, pero que su padre don Fortunato había decidido cerrar. Decidieron reabrirlas, adquirir algunas nuevas y crear Corporación Minera Patará.
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En 1963, Pedro Brescia lanzó la urbanización San Borja sobre parte de los terrenos de su fundo, y poco tiempo después seguiría la residencial Monterrico. Ambas son hoy zonas residenciales de la Lima moderna. En 1964 constituyó AESA, la primera firma que se encargaría de los negocios del grupo. Al año siguiente ingresó al accionariado de Rímac, un importante salto en su plan de diversificar el grupo y aprender de otros empresarios. No obstante, cuando todo parecía ir viento en popa, el poder político nuevamente tocó los negocios de grupo.

En 1968, el gobierno militar del general Juan Velasco Alvarado promulgó la Ley de Reforma Agraria que les arrebató sus predios agrícolas en los valles de Supe, Huaura, Chincha, y los terrenos de expansión urbana en las cuencas de los ríos Surco y Ate. No obstante, sus tierras en Limatambo sur, Valverde y el Naranjal no fueron tocadas.
Además, en 1973 el gobierno dispuso la nacionalización de la actividad pesquera y tomó el control de Tecnológica de Alimentos, que para ese momento ya tenía una participación del 4% de pesca en el Perú.
Adquieren participación en bancos
Lo anterior les abrió las puertas a nuevas oportunidades, ya que el gobierno había ordenado que la industria, la minería, la banca y los seguros, tradicionalmente dominada por el capital extranjero, debía tener necesariamente socios locales. El capital extranjero, en cambio, no podría tener más del 20% del accionariado en las empresas dedicadas a estos rubros.
En esta coyuntura, obligados los inversionistas extranjeros a reducir su participación, los Brescia adquirieron el 4% del Banco de Crédito del Perú y el 27% del Banco de Lima. En 1977, realizaron una operación similar logrando una importante participación en la minera Minsur. Paralelamente, incursionaron en el sector turismo al adquirir la administradora de hoteles Intursa. A finales de la década del setenta, los Brescia adquieron la Compañía Peruana de Pinturas (CPPP) y la Fábrica de Tejidos La Unión.
Empresas actuales del Grupo Breca
El Grupo Breca, acrónimo de los apellidos Brescia y Cafferata, opera 73 empresas en siete países, pero sigue teniendo sus raíces en el negocio de la tierra. Su inmobiliaria, Urbanova, tiene un rol protagónico en la estrategia corporativa y ha sido clave de sus recientes movidas empresariales.
Las empresas más representativas de este grupo son: BBVA Perú, Minsur, TASA, Seguros Rímac, Urbanova, Clínica Internacional, Minera Taboca, Intursa, Viñas de Oro, Centria, Marcobre, Cemento Melón, Tricolor, Qroma, entre otras.

¿En cuáles otros países tiene presencia el Grupo Breca?
A parte del Perú, el Grupo Breca está en Brasil, Ecuador, Estados Unidos y Chile. También tiene sedes en las Islas Vírgenes Británicas y Luxemburgo.
Tercera generación al mando
Como habíamos mencionado, tras muerte del fundador Fortunato Brescia en 1952, la dirección del grupo quedó en manos de su primogénito, Pedro Brescia Cafferata, con el apoyo de su hermano Mario. Además, las dos hijas del patriarca, Rosa y Ana María, también participaban en la toma decisiones. Pedro y Mario llevaron las riendas hasta edades avanzadas y tras su retiro (Mario falleció en 2013 y Pedro, que se había retirado unos años antes, en 2014), la dirección quedó en manos de la tercera generación de la familia.
Desde 2016, la gestión del Grupo Breca está a cargo de un comité de directivo conformado por cuatro miembros de la tercera generación: Alex Fort Brescia, hijo de Rosa, y Pedro Brescia Moreyra, hijo de Mario, quienes actúan por consenso y mantienen la tradición de los fundadores.
