En un mundo digital donde todo es conectado e inteligente, la aplicación de 5G, nube, IA y big data trae consigo una serie de desafíos en la construcción de infraestructura energética.
Según el informe de economía digital de las Naciones Unidas de 2019, la amplia aplicación de la tecnología ha impulsado a la sociedad a la era digital, una que cambiará profundamente la vida, la sociedad y los modelos económicos.
DEL 4G AL 5G
Actualmente, muchos países se están preparando para pasar de redes móviles 4G a 5G, más avanzadas.
Las velocidades de descarga 10 veces más rápida que las actuales cambiarán radicalmente la forma en que trabajamos, nos comunicamos y transmitimos videos.
Sin embargo, el rechazo a la red 5G de Huawei, en teoría, es porque podría controlar la tecnología en el corazón de estas redes y darle a China la capacidad de espiar o interrumpir las comunicaciones durante cualquier disputa futura.
Esto es clave a medida que se conectan a internet más cosas.
UNA VISTA DE SU RED
Huawei combina electrónica de potencia y tecnologías digitales para crear su concepto de “red de energía objetivo”.
– EVOLUCIÓN ORIENTADA AL FUTURO
Para apoyar la construcción de sitios 5G para los centros de datos, la arquitectura elástica puede cumplir con los requisitos de expansión de energía del gabinete y respaldar la evolución futura.
– ENTREGA SIMPLIFICADA
Cuando los operadores implementan 5G, no necesitan cambiar la fuente de alimentación, los gabinetes, la distribución de energía y los cables, las salas de equipos o la ingeniería. Esto permite una entrega rápida y una implementación a pedido y reduce la inversión inicial.
– RED DE CONDUCCIÓN AUTÓNOMA
La inteligencia artificial y los grandes datos pueden lograr la visualización de la infraestructura energética del sitio y del centro de datos y la O&M inteligente y automatizada; es decir, redes de conducción autónomas.