Recientemente el nuevo director ejecutivo de Hugo Boss, Marcos Langer, señaló que la casa de moda alemana desistirá en su intento de convertirse nuevamente en una marca de lujo.
Langer indicó, a un medio alemán, que “el esfuerzo de la compañía para hacer incursiones en el mercado de lujo no resultó ser útil para el negocio”.
Asimismo, el director ejecutivo de Hugo Boss, aseguró que “la empresa seguirá siendo una marca de primera calidad, sin embargo, ya no aspira ser el líder de lujo”.
Según una encuesta del banco suizo, UBS, el 59 % de los clientes del retail dijeron haber abandonado la marca porque los estilos ya no eran atractivos en comparación con los diseños que empezaron a recibir de otras firmas de ropa.
UBS, reveló también que “los niveles de estas respuestas fueron una confirmación temprana de que el negocio de Hugo Boss no estaba funcionando. Y que por ello se mostraban de acuerdo con la decisión de la administración de centrarse en sus productos”.
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Baja la rentabilidad del mercado de lujo
El mercado de lujo estaría atravesando una recesión mundial, que afecta principalmente a Estados Unidos y China y que provocó el cambio de Hugo Boss.
La ropa de lujo ya no es una prioridad para la mayoría de los consumidores, incluso para las personas más acomodadas, quienes prefieren la moda rápida u optan por comprar primero artículos tecnológicos o irse de viaje de vacaciones.
Otros factores que afecta la desaceleración del mercado de lujo en todo el mundo, es la incertidumbre económica y política de los Estados Unidos y los gustos cambiantes en China.