La International Business Machines Corporation, IBM, anunció este miércoles que despedirá a 3.900 empleados, aproximadamente 1.5% de su planilla. Apunta que la decisión forma parte de algunas desinversiones de activos y que la compañía no cumplió con su objetivo de efectivo anual, lo que empaña la expectativa de superar las estimaciones de ingresos en el cuarto trimestre.
Los despidos se centrarán en los trabajadores que queden tras la escisión de las unidades Kyndryl (infraestructuras tecnológicas) y Watson Health (inteligencia artificial en el campo de la salud). “Esperamos hacer frente a estos costes de transición a principios de año y prevemos un cargo de unos 300 millones de dólares en el primer trimestre“, ha señalado James Kavanaugh, director financiero de la corporación.
Aun así, en la llamada de ganancias del 25 de enero presentando los resultados del cuarto trimestre, Kavanaugh precisó que IBM espera seguir contratando en las áreas de mayor crecimiento. “IBM todavía está comprometida con la contratación para investigación y desarrollo orientados al cliente”, comentó a Reuters.
La compañía, informó de sus resultados al cierre de 2022, con un aumento de los ingresos del 5,5%, hasta 60.530 millones de dólares. Sin embargo, sufre una caída de beneficios del 71%, hasta US$1.639 millones, por culpa de un cargo extraordinario para pensiones.
IBM se sube a la ola de despidos en las tecnológicas
La compañía estadounidense de tecnología es la última del sector en sumarse a una continua ola de despidos masivos. Solo en esta semana se confirmó que Spotify y Uber también recortarán personal. Antes de ellos también lo anunciaron Microsoft, Google y Salesforce.
Y más atrás, desde el año pasado, los anuncios comenzaron con gigantes como Amazon, que hace unos días empezó a notificar de los despidos, Meta y Twitter. Este último tras la adquisición de Elon Musk de la plataforma y la reestructuración que ejecutó dentro.
El aire de desinversión y recortes laborales se debe principalmente a los efectos de la pandemia. Si bien esta impulsó una era digital sin precedentes, como el auge del e-commerce (en el caso de Amazon) y el desarrollo de nuevas tecnologías que requieren de personal capacitado, esto mismo ha sido el talón de Aquiles de la industria.
Las compañías han estado reduciendo su tamaño y recortando costos para hacer frente mejor a la recesión económica mundial. En medio de altos costos de vida y una inflación elevada, las empresas tecnológicas se han dado cuenta que contrataron más personal del que pueden costear. Incluso esta situación se trasladó a otros rubros, como el gastronómico donde McDonald’s anunció reducción de personal y la automotriz Ford.
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Por su parte, las acciones de IBM cayeron un 2% tras el anuncio. Analistas dijeron que la noticia de los recortes de empleos y la falta de flujo de caja libre estaban detrás de la caída.
“Parece que el mercado está decepcionado por el tamaño de los recortes de empleo anunciados, que solo ascendieron al 1,5% de su fuerza laboral”, dijo Jesse Cohen, analista senior de Investing.com. “Los inversores esperaban medidas más profundas de reducción de costos”.
El flujo de caja de IBM para 2022 fue de US$9.300 millones, por debajo de su objetivo de $10.000 millones, debido a necesidades de capital de trabajo mayores de lo esperado.
La compañía también pronosticó un crecimiento anual de los ingresos de un dígito medio en términos de moneda constante, más débil que el 12% que informó el año pasado. Asegura que la demanda de digitalización de negocios impulsada por la pandemia ha dado paso a un gasto cauteloso por parte de los clientes en medio de crecientes temores de recesión.
El crecimiento del negocio de software y consultoría de IBM se desaceleró secuencialmente en el cuarto trimestre, pero el gasto en la nube fue un punto brillante, con firmas de acuerdos que se duplicaron en 2022 para configurar servicios con socios como AWS de Amazon.com y Microsoft Azur.
Sus ingresos de nube híbrida aumentaron un 2% en el trimestre que finalizó el 31 de diciembre de 2022. Los ingresos totales se mantuvieron estables en US$16,69 mil millones en el cuarto período, pero 5 millones menos que en el mismo tramo de 2021.