El visual merchandising tiene como propósito maximizar las ventas de un comercio en base a elementos que sean agradables a la vista de los consumidores como es el color.
En relación, una buena composición gráfica beneficia la imagen que el cliente percibe de la tienda o negocio comercial, además de que ocasiona que éste se interese más en lo que se vende en el establecimiento.
Estamos en una época donde los elementos visuales cobran mayor peso, no sólo en espacios abiertos sino también en sitios online que lo veremos también en la nota.
Según el “Institute for Color Research”, los consumidores se forman una opinión de los productos en menos de 90 segundos desde su primera interacción con ellos, y entre el 62% y el 90% de esa evaluación está basada solamente en el color del producto.
El color es un ingrediente importante tanto o más que el diseño interior y exterior en general. Muchos minoristas cambian el esquema de color interior estacionalmente porque los colores de los productos de temporada son, a menudo, muy diferentes.
A continuación analizaremos 5 aspectos importantes en los que el color influye en la experiencia de compra:
1. Contar una historia: Elegir los colores que representan al concepto que quieres vender.
2. Clientes cómodos y tranquilos: Asociar el color a un estado de ánimo.
3. Alertar a los consumidores: Utilizar colores brillantes para captar su atención (con moderación. El rojo en exceso agita a los clientes).
4. Generar el reconocimiento de marca: Los colores pueden aumentarlo en un 80%. Trabajar los colores del diseño del logotipo ayudará a que los clientes asocien esos colores a la empresa.
5. Resaltar, en lugar de dominar, el producto.
Es así que el color resulta un elemento esencial del marketing, tanto en el diseño de un packaging, como en el momento de definir una imagen de marca (“branding”) o al realizar un anuncio.
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EL COLOR DE LA WEB INFLUYE EN LAS VENTAS ONLINE
Los grandes profesionales del marketing online afirman que es tan importante tener un producto o servicio de calidad como la manera de presentarlo.
Los pequeños detalles son los que marcan que un usuario termine comprando o no alguno de nuestros artículos o servicios. Los factores subliminales son decisivos para que un usuario adquiera los productos, como el color de nuestro portal corporativo. Un color adecuado puede provocar que un usuario se quede navegando o no por la tienda online.
El usuario compra y se descarga aplicaciones hasta en un 66% siempre y cuando las mismas tengan el color que le guste. Las decisiones de compra se toman en los 90 segundos después de ver un producto y el 90% de dicha decisión se hace en base al color que hayamos visto. El ratio de conversión aumenta un 21% cambiando el color del botón de la llamada a la acción del verde al rojo.
Los colores deben elegirse en función del público objetivo al que nos dirijamos, pero sobre todo dependiendo de los valores que deseemos transmitir.
Según estos factores debemos escoger el amarillo para la juventud, el azul para la lealtad, la confianza y la tranquilidad, el blanco para la transparencia y la limpieza, el naranja para la acción, el negro para transmitir exclusividad, sofisticación o lujo, el rosa para lo relacionado con lo femenino y el verde para la confianza.
Los colores menos recomendados son el rojo que transmite urgencia, inmediatez y además tienen que ver con la agresividad, y por tanto han de usarse con mucho cuidado ya que también evocan algo negativo o peligroso.