Este año se ha visto enmarcado por todos los problemas que ha dejado la presencia del COVID-19 en el mundo. En el mercado global la crisis en las cadenas de suministros trae más preocupación a medida que se acerca la temporada navideña. Actualmente, existe mayor demanda en bienes de consumo a consecuencia del incremento de las compras online y esto a su vez genera que haya más demanda de transporte y alquiler de contenedores para poder abastecer lo solicitado por los consumidores.
Son muchas las dificultades logísticas por las que atraviesan los diversos comerciantes del mundo. La crisis golpea fuertemente al comercio y esto genera incertidumbre de lo que pueda suceder más adelante. El atascamiento sigue aumentando en las cadenas de suministros, pues todo lo que se compra a través de internet es transportado en contenedores y el 80% de todos esos bienes se trasladan vía marítima y no hay disponibilidad suficiente de contenedores de gran volumen a consecuencia de la pandemia.
Además, el problema no solo radica en la escasez de contenedores, sino también en el alto costo de ellos, ya que, por ejemplo, un contenedor de 40 HC de gran capacidad previamente costaba entre 3.000 dólares y 4.000 dólares, pero ahora tienen un valor de entre 15.000 dólares y 20.000 dólares aproximadamente.
La dificultades se remontan a los cierres de las actividades económicas en Asia a inicios del año pasado. En este periodo se mantuvo varada grandes cantidades de mercancías y al que le siguió una abrupta salida de mercancías que acaparó gran cantidad de la capacidad de transporte en todo el mundo. En concreto, la repentina reactivación económica hizo que la mercancía atascada y los nuevos pedidos incrementaran la demanda de transporte y esto perjudicó el desenvolvimiento de las cadenas de suministros.
De hecho, según Alejandro Raya Quintanar, director senior de desarrollo de negocios de DHL Supply Chain México, “en diferentes puertos del mundo, en California, México, Brasil, Chile, hay una cantidad tremenda de barcos esperando ser descargados, porque simplemente los puertos no tuvieron la capacidad suficiente para todo lo que vino, porque cerraron o se acumularon las mercancías”.
Crisis de contenedores en Perú
Por otra parte, Infomercado relata que, de acuerdo a la Asociación Peruana de Operadores Portuarios (Asppor), “el costo de las exportaciones provenientes de Asia han aumentado un 500% a corto plazo”. Por ejemplo, las exportaciones que viajan de China al Callao ha incrementado hasta cinco veces respecto al año prepandémico. Entre tanto, los fletes que anteriormente tenían un valor de 2.000 dólares ahora cuestan 10.000 dólares.
Asimismo, el medio informó que la Asociación Marítima del Perú (Asmarpe) ha explicado que “si antes de la pandemia un contenedor en la ruta Shanghái-Callao–Shanghái demoraba 60 días, hoy puede demorar 90 o más”, lo que en definitiva genera una escasez de contenedores disponibles para las importaciones.
Todos estos problemas afectarán el abastecimiento en tiendas físicas y online porque los consumidores a medida que se reactiva la economía demandan más productos y mucho más durante la campaña navideña. Los retailers están haciendo todo lo que está a su alcance para responder a la demanda, pero no desestiman que pueden producirse retrasos significativos y escasez de productos en la Navidad.
Cabe destacar que durante la pandemia se importó más de lo que se exportó y regresar contenedores vacíos dentro de una ruta larga hace que se incremente el precio del transporte en la devolución. Además, “esta crisis mundial de escasez de contenedores y los altos precios se puede entender como una razón que está impulsando el alza de índices de inflación, siendo una situación que pone en jaque la recuperación del comercio internacional”.