De la gran tecnología brillante a productos masivos, ese ha sido el cambio por el que han pasado los smartphones. Con más de la mitad de los usuarios móviles que poseen un smartphone en Estados Unidos y los países desarrollados, y consumidores de mercados emergentes como India o China girando hacia modelos más baratos, la demanda se está desacelerando para estos dispositivos de alta gama.
Así, el precio promedio de un smartphone cayó a US$375 de US$450 desde inicios del año pasado. Esa caída ha amenazado el crecimiento de los ingresos y los márgenes de ganancias de Apple Inc. y Samsung Electronics Co., y podría exprimir a más empresas como Nokia Oyj y BlackBerry que contaban con nuevos productos para reactivar sus ventas. Entre los beneficiados se incluye a los recién llegados al mercado, como Huawei Technologies y Lenovo Group, que se especializan en equipos de bajo costo.
“Los días de gran crecimiento en el extremo superior del mercado se fueron”, dijo Michael Morgan, analista de ABI Research. “Son las empresas chinas que saben cómo sobrevivir con márgenes pequeños las que están listas para la lucha que está a punto de producirse”, agrega.