El Store Design o diseño de una tienda física debe aspirar a crear un ambiente estéticamente agradable, funcionalmente eficiente y comercialmente efectivo.
Tiene que abarcar todos los elementos que integran el diseño y, como tal, no debe haber ningún elemento tratado de forma individual sino en relación con el aspecto general del proyecto.
Por ello, hoy en día, al pasear por las zonas comerciales de las principales ciudades del mundo, encontramos tiendas llamativas de las grandes marcas globales. Estos establecimientos se han convertido en verdaderas embajadas de las compañías, y son claves para determinar la imagen que éstas proyectan.
El cuidado diseño de sus locales les ha servido para fomentar su identidad de marca a nivel global. En buena medida destacan porque quieren facilitar dentro de lo posible todo el proceso de compra. En este sentido, se puede decir con total rigor que estamos ante referentes del Brand Retail Design.
Hay muchos elementos a tener en cuenta en el diseño de la tienda como la ubicación geográfica, la proximidad al acceso, el clima, la eficiencia energética, la salud y la seguridad.
Store Design no es más que una interpretación superficial de un layout al diseño visualmente atractivo.
Aquí también resulta muy importante establecer un vínculo entre la posición estratégica, los colores, las formas y los materiales, los cuales se escogen no solo en base al deseo del diseñador o del propietario del negocio, sino también se parte del punto de vista del consumidor.
La combinación de estos elementos junto con la elección de los muebles apropiados así como una buena iluminación, va a crear un concepto emocional, el cual es que la tienda conmueva al cliente.
Una vez dentro, el diseño tiene que crear un entorno favorable para que los consumidores se animen a pasar más tiempo en la tienda, por lo que debe ir encaminado, en gran parte, a lo que él quiere y la experiencia que quiere vivir.
Esta noticia es auspiciada por: