Un ex ejecutivo de cobranzas de La Polar, que pidió reservar su identidad, reveló cómo desde fines del año 2009 la compañía intentó por todos los medios recuperar su cartera morosa y repactada unilateralmente.
En diciembre de 2009, se efectuaron las campañas, a modo de plan de cobranzas, denominadas “Salvavidas” y “Refréscame”, donde la meta era recuperar a los clientes “rojos” o más conocidos como repactados unilateralmente.
“Se dieron cuenta que había que cobrar en algún momento esa cartera, es más, en la medida en que avanzaba el tiempo, aumentaba el dinero recuperado”, afirma el ex ejecutivo.
Sin embargo, ambos planes no fueron exitosos. Por ello, en agosto de 2010 La Polar formó un laboratorio de “cobranzas” con 10 personas, y en diciembre del mismo ejercicio, se apuró el ritmo tratando de recuperar a 40.000 clientes mensuales, lo que duró hasta mayo de 2011.
“Se entregaban soluciones a la gente repactada unilateralmente: o pagaba la deuda total con un buen descuento, o volvía a repactar en la misma tienda en hasta 48 cuotas, con una tasa de 1,6%. Se llegó a trabajar con 70 personas en esto”, manifiesta el ex ejecutivo.
El 31 de mayo, que es el último día de pago, ingresaron a la caja de La Polar unos $1.700 millones, de los que $ 600 millones eran de los repactados unilateralmente.