La cadena Lápiz López saca punta a su plan de expansión este 2014. Luego de seis años en el mercado local, la chilena tendrá un plan de aperturas más agresivo.
“Apuntamos a cuatro tiendas por año, pero está en relación directa con la construcción de centros comerciales”, precisa Ramiro Álvarez, gerente de operaciones de la firma en el Perú.
Cada local supone una inversión de S/.250 mil solo en infraestructura. En esta etapa, las aperturas estarían orientadas hacia el norte, en Piura y Chiclayo, siempre en ‘malls’, mientras que en Lima abrirá en Real Plaza Salaverry en el mes de abril.
El retraso de algunos proyectos comerciales y la falta de espacios ralentizó el ritmo de aperturas de Lápiz López el año pasado. Su gerenta comercial, Patricia Ruiz cuenta que “para el 2013 debimos tener 15 tiendas y cerramos con 11”.
Hasta el momento, la cadena cuenta con siete locales en Lima, dos en Arequipa y otros dos en Trujillo.
Camino a seguir
A nivel ‘retail’, la cadena tiene como su principal diferencial a su portafolio de marcas propias especializadas (Alo, Baressi, Tegraph, entre otras). Aunque aún no representan el 50% de sus ventas, les permite tener peso en otras campañas del calendario, adicionales a la campaña escolar.
A su vez, manejan la representación de algunas marcas de nicho como Staedtler y a partir de este año incorpora a la marca alemana de escritura Schneider.
De este modo, Lápiz López proyecta que su operación en el Perú siga creciendo a doble dígito al cierre de este año y facturar por encima de los US$11 millones.
En el 2013 crecieron entre un 11% y 15%. Aunque no les quita el sueño, la cadena de librerías señala que la compra de alguna empresa en el Perú está dentro de su estrategia. “Si se da la oportunidad, la evaluaremos”, explica Álvarez.
Hoy, la operación del Perú representa el 8% de las ventas de la casa matriz en Chile, donde la cadena tiene 120 tiendas. “Ahora estamos en el Perú y Chile, pero la idea es abrir otros mercados”, señala.