El retail se transforma. La incorporación de las nuevas tecnologías así como el cambio de hábitos de los consumidores son sólo algunos de los aspectos que están variando en la industria. Un informe de Boston Consulting Group (BCG) detalla las diez tendencias que están transformando de arriba abajo la industria del retail.
1. Consumidores fuertes y exigentes: Con el actual acceso a información sobre producto, comparativa de precios y opiniones de otros clientes sobre el mismo, los consumidores pueden tomar decisiones informadas así como compartir ampliamente sus quejas. Los retailers deben añadir un valor significativo a lo que los clientes pueden encontrar por sí mismos, tanto online como en la tienda.
2. Conectividad ubicua: La disponibilidad de conectarse a la Red en el trabajo, en casa o incluso por la calle convierte a los consumidores en clientes a tiempo completo. Muchas de las compras que hacen las realizan a través del canal online y las ventas pueden dispararse por el creciente número de smartphones en el mercado, que se multiplicarán hasta finales de la década.
3. Mercado local, sostenibilidad creciente: Los compradores quieren consumir de forma responsable y sostenible y hacerlo en establecimientos locales. Además, los clientes quieren pruebas del origen orgánico de lo que compran. No obstante, todavía está por ver si ese mismo comprador estará dispuesto a pagar más por un producto sostenible.
4. Aumento de datos de los consumidores: Puntos de venta, redes sociales, páginas web corporativas y URL de seguimiento generan una gran cantidad de datos de los consumidores. No obstante, sólo unos pocos retailers son capaces de explotar todo el valor potencial de esa información. Llevará tiempo, porque el volumen de datos todavía crece a un ritmo más elevado que el de la habilidad de procesarlos.
5. Nueva era del marketing: Con más datos de los consumidores, sus actividades online y sus patrones de compra, los retailers deben ser capaces de crear más campañas de marketing personalizadas. Además, estas iniciativas tendrán que estar bien estudiadas y calibradas, porque el consumidor es cada vez menos tolerante a acciones de marketing erróneas.
6. Retailing científico: Aplicando algoritmos inteligentes y estudiados análisis al gran volumen de datos que reciben de múltiples fuentes, las compañías pueden optimizar cualquier aspecto de su negocio, incluyendo, entre otros, precios, espacio en el almacén, abastecimiento o personal.
7. Poder creciente del retailer: Los retailers de mayor tamaño, los que más facturan, tiene más poder sobre los proveedores. No obstante, en muchas categorías, el creciente poder del retailer podría inclinarse en favor de los grandes actores de la Red.
8. Maduración de las tecnologías de retail: Un gran abanico de tecnologías está permitiendo a las compañías racionalizar las funciones del almacén e incrementar su eficiencia, ayudando a compensar el aumento de los costes laborales. Aunque el ahorro de costes es parte de la solución para los retailers que trabajan offline, no alterarán de forma drástica la economía relativa entre las transacciones realizadas en tienda y las hechas en la Red.
9. Límites difusos entre canales, formatos y marcas: Más que pensar en canales, los consumidores simplemente son oportunistas. Si tienen la necesidad y pueden cumplirla fácil y convenientemente lo harán. No se plantearán porque en un Starbucks hay libros o porque en una farmacia venden comida.
10. Economía de tienda: El auge del comercio online ha hecho descender el tráfico en tienda, forzando a los retailers a replantearse el