En el caso peruano, si bien el mercado de los centros de belleza aún está en proceso de profesionalización, empieza a crecer.
“A nivel nacional existen 30 mil salones de belleza de los cuales el 50% se encuentra en Lima. De esos 15 mil, solo 9,500 son formales, es decir, un 43% es informal”, detalló Paul Cabrera Plasencia, director general de ExpoBeauty 2013.
Los locales formales, un gran número de ellos están ubicados en los distritos de Jesús María, San Juan de Miraflores, San Juan de Lurigancho y San Martín de Porres, por mencionar algunos. Allí, la inversión para equipar un local puede ser de S/. 20 mil, y su proliferación va de la mano de quienes egresan de esta carrera.
“El que sale del instituto (de belleza) apunta a abrir su peluquería porque es un negocio altamente rentable, la facturación puede ser de entre S/. 10 mil y S/.15 mil al mes”, señaló Plasencia.
Pero en el caso de las peluquerías dirigidas al segmento A1, que se estiman unas 80, donde se cree hay un gran potencial para el ingreso de grandes cadenas locales y extranjeras, vía franquicia, por ejemplo.
En este segmento la inversión es mayor ya que puede ir de US$ 80 mil a US$ 300 mil, dependiendo del metraje. Normalmente, esta última cifra se da en desarrollo de centros spa, donde la oferta es más variada.
“El foco de crecimiento está en Lima pero, como en otros sectores no se debe descuidar la provincia. Cadenas como Montalvo, por ejemplo, han apostado por llegar al interior del país con muy buenos resultados”, sostiene Plascencia, quien estima que en el 2012 solo las cadenas facturaron entre US$ 1.5 millones y US$ 2 millones.
Con esa opinión coincide Felipe Cadierno, gerente general de la cadena española Marco Aldany que para este 2013 prevé ingresar a Piura, Trujillo y Arequipa, vía un centro comercial o puerta calle, aunque la opción más viable es el “mall”.
A su turno, Ángel Acevedo, presidente del Comité Peruano de Cosmética e Higiene (Copecoh), sostiene que el panorama que se ve hoy en el país es parecido al de España hace algunos años.
“Este tipo de negocio empezó con pocos locales y poca inversión y al ver el crecimiento se desarrolló, generando grandes cadenas, eso se replicará en el país. Si hacemos un comparativo es como lo que pasa con las cadenas de farmacias en el país con un crecimiento importante”, sostuvo.
En esa línea mencionó que el crecimiento del mercado vendrá con el ingreso de grandes cadenas internacionales.
A nivel de mercado, se dice que este año ingresarían tres nuevas marcas internacionales, una de ellas de EEUU, apuntando al segmento A. Ello no implica que el segmento C no tenga un importante potencial.
Pero otra tendencia que se daría, dice Plasencia, es que las cadenas pequeñas desaparecerían, absorbidas por las grandes cadenas. “La cadena grande, vía franquicia o capital propio, tiene recursos inmediatos para expandirse y equipar, lo que no puede hacer una pequeña”, indicó el experto.