MCDonald’s se suma a la larga lista de empresas que vienen siendo afectadas por la variante ómicron y por eso decidió que sus restaurantes trabajen un 10% menos de horas por falta de personal.
Chris Kempczinski, director ejecutivo de McDonald’s, dio a conocer que los 13 mil restaurantes de McDonald’s en los Estados Unidos se han visto obligados a reducir su horario de apertura en un 10% en promedio debido a la escasez de personal, publicó The Wall Street Journal.
La cadena de comida rápida viene luchando contra la última variante del coronavirus, el aumento de la inflación y la escasez de mano de obra.
En octubre del año pasado Kempczinski ya había reconocido que el servicio de los restaurantes se estaba volviendo más lento porque no podían encontrar suficiente personal y que algunos restaurantes habían reducido sus horarios.
El directivo agregó que el personal de McDonald’s “no se había recuperado tan rápido como esperaba” y ya anticipaba que los problemas persistirían en “los próximos trimestres”.
En las redes sociales incluso, un mensaje se volvió viral cuando en un restaurante de MCDonald’s un empleado colocó un mensaje disculpándose por la lentitud del servicio ante la falta de trabajadores.
Empleados tienen temor de contagiarse
El panorama luce complicado para la industria restaurantera debido a que los estadounidenses están renunciando a sus trabajos en busca de mejores salarios, beneficios y mejores condiciones laborales y que otras personas han decidido cambiar de industria, jubilarse anticipadamente o tienen temor de ser contagiados.
Algunos restaurantes han tenido que recortar los horarios de trabajo, reducir sus menús, abandonar las comidas en el lugar y subir los precios, en buena medida porque no tienen suficiente personal.
En el caso de McDonald’s, Kempczinski reveló que la cadena ha aumentado un 15% el salario de sus empleados en el último año, con el propósito de retenerlos y no agudizar más la crisis.
Recientemente, se conoció que minoristas como Starbucks, Nike y Walmart también se han visto obligados a recortar su horario de atención o en algunos casos cerrar algunos de sus locales debido a que no cuentan con personal suficiente para atender a los consumidores.