En la máquina expendedora de la parada de Bryant Park, L’Oréal ha incluido una selección de productos para los ojos, los labios o las uñas que las consumidoras que lo deseen pueden comprar al momento. La máquina cuenta con un espejo frontal que analiza el vestuario de la clienta que quiere comprar y le ofrece productos que complementan a las prendas que lleva o que contrastan con ellas a través de animaciones que aparecen al lado de su imagen.
Hasta ahora, enseñas y grupos de cosmética como Benefit o Sephora han llevado a cabo iniciativas de este tipo en espacios como aeropuertos, pero L’Oréal es la primera que realiza un proyecto así en una estación de metro.
La compañía ha escogido la estación de 42nd Street y Bryant Park por su cercanía con la Quinta Avenida, por el importante tráfico turístico y por su asociación histórica con la Semana de la Moda de Nueva York.