Durante el ultimo año, Mango ha venido aumentando el porcentaje de prendas con características sostenibles en su colección. Esta temporada, el 79% de las prendas producidas por la firma son sostenibles.
En este sentido, la compañía se ha propuesto que para el año 2022 el 100% de sus prendas deben tener características sustentables.
Todas estas prendas con características sostenibles se etiquetan bajo el nombre Mango Committed, una colección que la multinacional lanzó en 2017 en formato cápsula para avanzar en su compromiso hacia una moda más sostenible y que ha ido evolucionado hasta convertirse en una colección permanente de la firma, que engloba todas las prendas con características sostenibles de las diferentes líneas.
“Tenemos el compromiso de seguir trabajando para ser una empresa cada vez más sostenible. Es por ello que estamos dando grandes pasos en proyectos muy ambiciosos que nos van a permitir minimizar nuestro impacto y alcanzar los exigentes objetivos de sostenibilidad que nos hemos marcado para los próximos años”, explicó el consejero delegado de Mango, Toni Ruiz.
La marca ha recogido, durante 2020, 42 toneladas de prendas a través del proyecto de reciclaje Second Chances, lo que, a pesar de la pandemia, supone un aumento del 23,5% respecto a las prendas recogidas durante 2019.
La firma lleva a cabo esta iniciativa con la ayuda de Moda re-, un proyecto creado por Cáritas, cuya finalidad es darle una segunda vida al textil. Estas prendas se recogen en contenedores ubicados en las tiendas de Mango, para su reutilización, reciclaje y valorización energética.
En 2020, la compañía contaba con 610 puntos de reciclaje en las tiendas de 11 países y prevé ampliar este servicio en 2021 a países como Austria, Italia, Polonia, Turquía, Suiza y Rusia, que sumarán más de 200 nuevos puntos de reciclaje.
Por otro lado, como parte del compromiso adquirido por Mango tras la firma del Fashion Pact y relativo al pilar de la biodiversidad, la compañía inicia, a partir de abril, una colaboración con la Asociación Vellmarí, dedicada a realizar proyectos de conservación y educación en el Mediterráneo desde su base en Formentera.
Concretamente, Mango apoyará el proyecto Posidonia Lab, pionero en conservación marina y que integra innovación, investigación, educación marina y concienciación para la protección de la posidonia, una especie endémica del Mediterráneo.
Paralelamente, y con el objetivo de avanzar en otro de los pilares del Fashion Pact, en el de la protección de los océanos, Mango comenzará a sustituir, a partir de abril y con sus proveedores de Turquía, las bolsas de plástico de su packaging por bolsas de papel.
Progresivamente, seguirá con el resto de los países en los próximos meses. En 2020, la firma se convirtió en la primera gran empresa del sector textil en España en iniciar el proceso para dejar de utilizar 160 millones de bolsas de plástico anuales.